A pesar de los esfuerzos realizados el problema de la obesidad en el mundo se mantiene en aumento. Lo más importante es acabar con la creencia de que sólo tiene relación con la imagen física. En realidad su impacto es más profundo porque aumenta el riesgo para desarrollar más de 100 enfermedades distintas.
Para entender su impacto, un estudio publicado en The Lancet menciona que más de mil millones de personas tenían obesidad en el 2022. A partir de lo anterior se observa que desde 1990 la cifra se ha duplicado entre los adultos y se ha multiplicado por cuatro entre los niños y adolescentes.
Impacto de la obesidad en el mundo
Otro dato que se proporciona en el estudio es que, a pesar del descenso de los índices de desnutrición, este problema sigue siendo importante en muchos lugares, sobre todo en Asia Sudoriental y en el África subsahariana.
Con esto en mente, en el 2022 los índices combinados de desnutrición y obesidad más elevados se registraron en países insulares del Pacífico y el Caribe y en países de Oriente Medio y África septentrional.
¿Qué es la malnutrición?
La malnutrición, en todas sus formas, incluye la desnutrición, la insuficiencia de vitaminas y minerales, el sobrepeso y la obesidad. Mientras que la desnutrición causa la mitad de las defunciones de niños menores de 5 años, la obesidad puede provocar enfermedades no transmisibles como cardiovasculopatías, diabetes y algunos tipos de cáncer.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha ayudado a recoger y analizar los datos empleados en este estudio, y el Observatorio Mundial de la Salud ha publicado la totalidad de los datos en su página.
“Este nuevo estudio pone de manifiesto la importancia de prevenir y controlar la obesidad desde las primeras etapas de la vida y hasta la edad adulta a través de la alimentación, la actividad física y la atención necesaria”, afirma el Dr. Tedros Adhanom, Director General de la OMS.
Para recuperar el terreno perdido a fin de alcanzar las metas mundiales de reducción de la obesidad en el mundo, tanto las autoridades públicas como la sociedad civil y los ciudadanos tendrán que ponerse manos a la obra.
Con ese fin, deberán basarse en políticas basadas en la evidencia publicadas por la OMS y por las autoridades nacionales de salud pública, y apoyarse también en la cooperación con el sector privado, que debe hacerse responsable de los efectos de sus productos en la salud.
¿Qué es la obesidad?
La obesidad es una enfermedad crónica compleja cuyas causas se conocen bien. También se ha demostrado cuáles son las intervenciones basadas en la evidencia que son necesarias para hacer frente a la crisis mundial que causa este problema.
En la Asamblea Mundial de la Salud celebrada en 2022, los Estados Miembros de la OMS adoptaron el plan mundial de la OMS para frenar a la obesidad, con el que se prestará apoyo a las medidas que se tomen en los países hasta el 2030.
Recomendaciones para detener el avance de la obesidad en el mundo
- Medidas para fomentar las prácticas saludables desde el primer día, como la promoción, la protección y el apoyo para la lactancia materna.
- Legislación sobre las prácticas perjudiciales de comercialización a los niños de alimentos y bebidas.
- Políticas aplicables a la alimentación y la nutrición en las escuelas que incluyan, por ejemplo, iniciativas para regular la venta de productos ricos en grasas, sal y azúcares en la cercanía de las escuelas.
- Políticas fiscales y de precios para fomentar la alimentación saludable.
- Políticas sobre el etiquetado nutricional.
- Campañas de sensibilización y formación para la población relativas al ejercicio y la alimentación saludable.
- Normas aplicables a la actividad física en las escuelas.
- Integración de los servicios de prevención y control de la obesidad en la atención primaria.
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