La radiología intervencionista ha emergido como un pilar para el cáncer de hígado, que es el tercer tipo de cáncer más mortal en México. Este tipo de procedimientos para tratar a pacientes con carcinoma hepatocelular, es llevada a cabo por radiólogos intervencionistas.
La radiología intervencionista permite realizar procedimientos de forma menos invasiva y rápida
Además, permite realizar los procedimientos de una forma menos invasiva, rápida y de forma ambulatoria. Esto, a su vez, permite reducir los reingresos por complicaciones, disminuir el tiempo de recuperación y un mejor pronóstico y calidad de vida de los pacientes. A su vez, los pacientes con enfermedad temprana pueden obtener tasas de curación similares a la cirugía, con menor morbilidad.
Uno de los tipos de cáncer que puede tratarse con radiología intervencionista es el carninoma hepatocelular, el n de cáncer de hígado en México, cuyo diagnóstico tardío es muy común. Así que los especialistas recalcan la importancia de la prevención, puesto que la detección a tiempo en pacientes de alto riesgo mejora la esperanza de vida.
Se puede utilizar en combinación con otros tratamientos
En la actualidad, en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, se llevan a cabo en torno a 100 procedimientos terapéuticos a pacientes con cáncer hepático, con una tendencia de incremento de 30% anual.
Asimismo, se puede destacar que la radiología intervencionista se puede utilizar en combinación con otros tratamientos para así aumentar su eficacia. Las técnicas empleadas pueden ayudar a reducir el tamaño de tumores y es ideal también para aquellos pacientes que no son candidatos a una cirugía completa.
Lo que sí está claro es que, en la actualidad, contar con más forma de atención para pacientes demuestra el avance que hay hoy en día para hacer frente al incremento de los casos de cáncer entre la población a nivel mundial.