Las autoridades sanitarias de Estados Unidos emitieron una alerta sobre la presencia de la bacteria Vibrio vulnificus o “bacteria devoradora de carne”, en la costa este del país y el Golfo de México.
De acuerdo con lo informado por el Departamento de Salud de Florida, la “bacteria devoradora de carne” ya cobró la vida de al menos cinco personas durante 2023, lo que ha generado preocupación debido a su peligrosidad.
¿Qué es la “bacteria devoradora de carne”?
La Vibrio vulnificus es una bacteria que se encuentra en ambientes marinos cálidos y con bajo contenido de sal, como los estuarios.
Se le considera especialmente activa durante los meses de verano, desde mayo hasta octubre, cuando las aguas se calientan. Su modo de transmisión principal es a través de la ingestión de mariscos contaminados o por contacto con aguas marinas infectadas.
¿Por qué es tan peligrosa?
Esta bacteria es conocida por su agresividad y los daños que puede causar en el cuerpo humano. Puede ingresar al torrente sanguíneo a través de heridas abiertas o cortes recientes en la piel, lo que la convierte en una amenaza particularmente peligrosa para quienes tienen heridas expuestas mientras están en contacto con aguas marinas contaminadas.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) advierten que alrededor de 80 mil personas enferman anualmente debido a la Vibrio vulnificus en los Estados Unidos. Lo alarmante es que aproximadamente una de cada cinco personas con esta infección muere como resultado de la enfermedad, a menudo dentro de uno o dos días después de enfermarse.
Las personas más vulnerables a esta bacteria son aquellas con sistemas inmunológicos debilitados, como ancianos o individuos mayores con problemas de inmunidad. La Vibrio vulnificus puede causar infecciones graves y potencialmente mortales en estos grupos de riesgo.
Síntomas de la bacteria devoradora de carne
Los síntomas de la infección por Vibrio vulnificus pueden variar desde una infección leve de la piel hasta una infección más grave que afecta los órganos internos.
De acuerdo con información de los CDC, los síntomas más comunes incluyen:
- diarrea acuosa (líquida), con frecuencia acompañada de cólicos estomacales, náuseas, vómitos y fiebre;
- infecciones del torrente sanguíneo: fiebre, escalofríos, presión sanguínea peligrosamente baja; y lesiones en la piel con ampollas;
- infecciones en heridas, que podrían propagarse al resto del cuerpo: fiebre, enrojecimiento, dolor, hinchazón, sensación de calor, descoloración y secreción (líquido que sale de la herida).
Prevención
Para reducir el riesgo de contraer esta infección, los médicos aconsejan tomar precauciones, como evitar el consumo de mariscos crudos, especialmente ostras, ya que son conocidas por ser un vector común de la bacteria.
También se recomienda evitar bañarse en el mar o agua salobre si se tienen heridas abiertas o cortes recientes en la piel, ya que esto puede proporcionar una entrada directa para la bacteria.