- Durante la cuarta ola de calor se esperan temperaturas de entre 30 y 45°C en gran parte del territorio nacional.
- De acuerdo con la UNAM los estados más afectados serán Campeche, Coahuila, Chihuahua, Tamaulipas, Veracruz, Yucatán, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Sonora, Tabasco, Nuevo León, San Luis Potosí y Sinaloa.
- El estrés térmico laboral provoca desde un simple dolor de cabeza hasta deshidratación, confusión y problemas respiratorios.
Desde el pasado 1 de julio dio inicio la cuarta ola de calor en México y se espera que se prolongue al menos hasta el día 10 de este mes. Durante este lapso se esperan temperaturas de entre 30 y 45°C en gran parte del territorio nacional, según informaron especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Pero más allá de la incomodidad también es un factor de riesgo para desarrollar múltiples problemas de salud.
Casos mortales que han ocurrido
De ninguna manera se trata de un tema menor porque apenas hace un par de semanas se registró un lamentable hecho. Se trata de una enfermera de la tercera edad que fue encontrada sin vida dentro de su hogar en Coahuila. Al hacer las investigaciones se detectó que la causa del siniestro fue el calor extremo.
Con esto en mente, dentro del ambiente laboral estas altas temperaturas provocan el llamado estrés térmico laboral. Se trata de un trastorno que altera el desarrollo de las actividades productivas, explica Felipe Cuadra, especialista en desarrollo organizacional y cofundador de Rankmi.
De acuerdo con los especialistas de la UNAM, los estados más afectados por este fenómeno meteorológico también conocido como canícula serán: Campeche, Coahuila, Chihuahua, Tamaulipas, Veracruz, Yucatán, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Sonora, Tabasco, Nuevo León, San Luis Potosí y Sinaloa.
“El impacto del calor en la productividad laboral es un tema relevante, en especial en estos momentos en que experimentamos aumentos de temperaturas que tienen el potencial para afectar nuestra salud y rendimiento, por lo que es muy recomendable que las empresas tomen medidas para prevenir afectaciones a su personal”.
Por su parte, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) creó lineamientos para atender el impacto del cambio climático en los ambientes laborales. Por ejemplo, recomienda que los espacios de trabajo cuenten con condiciones adecuadas para evitar temperaturas extremas, realizar pausas para evitar deshidratación, agotamiento o golpes de calor y que los trabajadores tengan garantizado el acceso a agua potable.
En este sentido, en nuestro país existe la Norma Oficial Mexicana Nom-015-Stps-2001 Condiciones térmicas elevadas o abatidas-Condiciones de seguridad e higiene. Su objetivo es establecer las condiciones, niveles y tiempos máximos permisibles de exposición a condiciones térmicas extremas, que, por sus características, tipo de actividades, nivel, tiempo y frecuencia de exposición, sean capaces de alterar la salud de los colaboradores, y aplica a para todos los centros de trabajo en México en los que exista exposición a condiciones térmicas extremas.
¿Qué es el estrés térmico laboral?
El estrés térmico laboral generado por las altas temperaturas puede provocar desde un simple dolor de cabeza, a la aparición de debilidad, fatiga, irritación en la piel, calambres musculares, náuseas, abundante sudoración, deshidratación, confusión y problemas respiratorios, entre otros.
A medida que la temperatura corporal supera los 37°C, nuestro cerebro se ve obligado a destinar más recursos para regularla, lo que afecta la atención, la concentración y la memoria.
Recomendaciones durante la cuarta ola de calor
- Evitar la exposición a temperaturas extremas, corrientes de aire frecuentes y cambios bruscos, asegurando que los empleados puedan trabajar a una temperatura estable durante toda la jornada laboral.
- Aclimatar a los empleados al calor de acuerdo con el esfuerzo físico que realizan, ajustando los ritmos de trabajo a la tolerancia a la temperatura y manteniéndolos adecuadamente hidratados.
- Evitar fuentes directas de luz solar a través de ventanas o estructuras, creando un entorno de trabajo confortable.
- En términos de productividad, las empresas deben anticipar que los trabajadores expuestos a altas temperaturas pueden experimentar dificultades para desempeñarse en sus funciones, lo que puede provocar una disminución en la productividad de las organizaciones.
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