- El 4 de febrero se conmemora el Día Mundial de Lucha contra el Cáncer.
- Con la medicina de precisión se apuesta al tratamiento adecuado, para el paciente adecuado y en el momento adecuado.
- La genómica y la genética juegan un papel clave en el enfoque porque a través de ellas se puede identificar tratamientos ideales para cada paciente.
La tecnología avanza a pasos agigantados y de forma permanente se desarrollan importantes avances de todo tipo. Dentro de los más importantes se encuentra la medicina de precisión debido a su potencial impacto contra diversos tipos de tumores. Por eso es una de las opciones que generan mayor esperanza entre la comunidad médica.
La magnitud del problema cada vez es mayor
El cáncer es la principal causa de muerte en todo el mundo. En los países en desarrollo se estima un aumento en la incidencia del 80%. Por lo tanto, para el 2030 se espera que existan más de 20 millones de casos.
En el caso de México el cáncer es la tercera causa de muerte porque representa el 12% del total de las defunciones. Cada año se registran alrededor de 148 mil nuevos casos (65.5 mil en hombres y 82.4 mil en mujeres).
Debido a los cambios en el crecimiento y el envejecimiento de la población, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que para el 2040 la cifra podría llegar a los 30 millones anuales. No obstante, la tendencia de las defunciones podría reducirse significativamente porque se calcula que entre 30% y 50% de los cánceres son prevenibles mediante la adopción de hábitos saludables, diagnósticos oportunos y tratamientos personalizados.
¿Qué es la medicina de precisión?
El doctor Luis Felipe Reyes, gerente médico de Janssen México, explicó que, a nivel mundial, el cáncer es una enfermedad que va en aumento y es considerada como una de las principales causas de muerte.
“Por ello, Janssen se suma con su compromiso enfocado en la medicina de precisión para seguir transformando la manera de tratar el cáncer. Se trata de una de las mayores innovaciones en oncología y está centrada en reconocer que cada paciente es único y que las diferencias individuales en sus genes, entornos y estilos de vida deben considerarse en los tratamientos específicos que reciben para que sean más eficaces y seguros”.
Esta estrategia terapéutica se basa en conocer a detalle a cada paciente y a que la forma de abordar el cáncer debe ser personalizada e integral. Por eso, las investigaciones de los últimos años se enfocan en la medicina de precisión para seguir dando soluciones innovadoras a cada una de las personas.
Y es que, la genética, el tipo de cáncer y el ambiente de cada paciente influyen en el diagnóstico, la eficacia del tratamiento, el pronóstico y la manifestación de efectos adversos.
Un ejemplo de ello es el enorme compromiso de acompañar, durante todo el curso de la enfermedad, y mejorar la vida de los pacientes con cáncer de próstata, controlando el presente y definiendo el futuro.
Lo mismo ocurre con otros tipos de cáncer hematológicos, como el mieloma múltiple. Es la segunda enfermedad hematológica en orden de frecuencia en el mundo y una de las afecciones malignas en la que se han alcanzado mayores progresos en los últimos 15 años gracias a la incorporación de nuevos avances con mecanismos de acción que permiten optimizar y personalizar el tratamiento con el fin de mejorar los resultados para cada paciente.
La medicina personalizada de precisión para el cáncer utiliza información específica del tumor de una persona con el objetivo de facilitar el diagnóstico, planear y determinar cuál es el tratamiento más eficaz o dar un pronóstico real y certero. Los beneficios de este tipo de innovación son aportar eficiencia y valor al sistema de atención de salud ya que contribuye a evitar tratamientos ineficaces, respaldando una gestión más efectiva.
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