• La comida es necesaria para todas las personas pero cuando no se ingieren los productos adecuados se puede caer tanto en la desnutrición como en la obesidad.
• Un adecuado balance no solo protege al cuerpo sino que también puede mejorar la respuesta inmune de las vacunas.
• Desde una moderación en las cantidades hasta una hidratación constante son la base para una alimentación saludable.

El deseo de cualquier persona es tener una vida alejada de enfermedades y molestias. Se trata de una noble aspiración pero se debe trabajar para conseguirla. Se puede empezar con la alimentación por ser algo necesario para todos aunque para que sea saludable es necesario seguir una serie de pasos.

En este caso, nadie puede dejar de comer porque provocaría una serie de graves problemas. Lo ideal es hacerlo de una forma correcta basada en el equilibrio y pequeñas porciones. De esta manera se evitan los peligrosos extremos marcados por la desnutrición y la obesidad.

¿Cuál es la forma correcta de comer?

Con esto en mente, la nutrióloga Mónica Hurtado, especialista de Quiero Saber Salud, comparte 10 recomendaciones que se deben seguir para lograr una alimentación saludable.

1. Di sí a la variedad de alimentos: Es importante destacar que no hay alimentos buenos ni malos: verduras, frutas, carne, pescado, legumbres, agua, bebidas y semillas, son solo algunos de los elementos que se deben incluir en las comidas diarias. En México, la Norma Oficial Mexicana (NOM) incluyó en sus guías el plato del buen comer, con el propósito de promover y educar acerca de una alimentación sana con una gran gama de productos.

2. Cuida las cantidades: A pesar de que es vital incluir una gama rica de productos alimenticios en la dieta diaria, es importante moderar las porciones que incorporamos en nuestros platillos. Esto es importante para buscar un balance que te ayude en la prevención y control de enfermedades.

3. Cocina sana: Actualmente existen diversas alternativas para elaborar platillos o menús diariamente. Aceite de aguacate, sustitutos de azúcares, pan integral y productos a base de soya son solo algunas de las propuestas que vale la pena explorar.

4. Snacks o refrigerio: Sin duda es natural que de vez en cuando surjan los antojos por algún alimento y está de más decir que está permitido saciarlo, pero es vital hacerlo de manera moderada, además de optar por opciones saludables como: fruta, yogures, semillas, bebidas sin calorías u opciones locales como amaranto u obleas. ¡Es cuestión de creatividad!

5. Hidratación constante: El agua es vital para el buen rendimiento de las funciones corporales ya que, entre el 60% y 70% del peso corporal está compuesto por agua. Incluso, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) recomienda ingerir de 2 a 2.5 litros de agua diarios para contar con una cobertura completa de hidratación.

6. Días libres: Toda rutina cuenta con algún día de descanso para no saturar el funcionamiento general. Ante ello, es válido optar por un día en el que se consuma algún snack o solicitar comida a domicilio fuera de la dieta, pero como en todo, existen alternativas que nos ayudan a seguir lo más apegado a nuestra dieta.

7. Consulta a tu especialista: Es importante contar con la guía de expertos en alimentación y nutrición para poder seguir una rutina adecuada e integral. Hay que recordar que cada cuerpo es diferente, por lo que los requerimientos para el funcionamiento óptimo de cada uno son individuales.

8. A mayor conocimiento en salud, mejor elección para su control: es importante contar con la información más actualizada y no prohibitiva de alimentos o bebidas respecto a las rutinas de alimentación recomendadas. Organizaciones como Quiero Saber Salud (QSS) se preocupan por compartir información de manera constante y de fácil acceso para el público de diferentes edades.

9. Siembra tu propio huerto: cada vez son más las personas en el mundo que deciden plantar sus propias verduras y hortalizas en sus casas. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), los huertos domésticos “se están convirtiendo en una fuente cada vez más importante de alimentos”. Algunos de los cultivos son: zanahorias, espinacas, rábanos, tomates, fresa, lechuga, entre otros.

10. No desperdicies alimentos o bebidas. Toma consciencia de los alimentos que consumirás para no desperdiciar nada. De acuerdo con la FAO, se estima un desperdicio global de entre un cuarto y un tercio de los alimentos producidos anualmente para consumo humano, esto representa aproximadamente 1,300 millones de toneladas de alimentos, lo suficiente para alimentar a 2,000 millones de personas.

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