La forma de adquirir medicamentos podría estar próxima a cambiar para siempre gracias a la compañía colombiana INSSA, la cual presentó recientemente su primera línea de máquinas expendedoras de medicamentos.
La creación de estas máquinas surgió con el objetivo de facilitar y mejorar la entrega de medicamentos a pacientes con enfermedades crónicas, personas para las cuales (dada su condición) no resulta tan sencillo desplazarse mes con mes hasta su centro de salud correspondiente para adquirir el tratamiento necesario.
Cabe destacar que las máquinas expendedoras en cuestión no funcionan del mismo modo que una máquina expendedora de golosinas:
Una vez que el paciente ha recibido su diagnóstico y receta por parte del médico tratante, el paciente deberá de acudir con un químico de farmacia para su primera entrega a fin de que éste ingrese en el sistema todos los datos del paciente para que pueda continuar acudiendo por su tratamiento de manera simplificada cada vez que necesite abastecerse nuevamente.
Asimismo, las máquinas cuentan con un sofisticado sistema de identificación biométrica que evitará cualquier uso indebido de las mismas, así como el abuso de sustancias, pues la propia máquina será capaz de establecer la recurrencia con que cada paciente necesitará su medicamento de acuerdo con lo indicado por su médico de cabecera.
Por otra parte, la compañía también presentó otro tipo de máquinas expendedoras diseñadas para la entrega de consumibles hospitalarios como uniformes quirúrgicos, instrumental y botiquín, cuya finalidad es reducir al mínimo los accidentes laborales.
¿Qué te parecen estas ideas?, ¿crees que pudieran ser implementadas en México de manera exitosa?