Tras los terribles acontecimientos suscitados la madrugada del domingo 12 de junio en un bar de Orlando, Florida, la American Medical Association (AMA) ha declarado por primera vez en su historia la violencia con armas de fuego como un “problema de salud pública” dentro de los Estados Unidos.
Si bien la decisión tomada por el organismo (aprobada de forma casi unánime) es meramente simbólica, podría ser justo lo que hacía falta para promover la reforma a la ley de portación de armas de fuego en Estados Unidos, ley que facilitó la realización de 372 tiroteos masivos en la Unión Americana durante 2015 (más de uno al día), según datos proporcionados por el portal Mass Shooting Tracker.
Cabe destacar que anteriormente otras organizaciones médicas como el American College of Physicians y el American College of Surgeons ya habían declarado este tipo de violencia como problemas de salud público con anterioridad; sin embargo, la importancia del pronunciamiento realizado por la AMA radica en que ésta organización abarca un campo más amplio e reúne a expertos de otras asociaciones médicas de los 50 estados de la Unión Americana.
Dentro de su postura la AMA además ha señalado que el creciente número de víctimas por armas de fuego requiere de “una respuesta y solución comprensiva”, pues se trata de una crisis “inexistente en cualquier otro país desarrollado”.
Asimismo, con el dictamen de la AMA finalmente se podrán realizar estudios con fondos federales para analizar la violencia por armas de fuego de la misma manera en que se evalúa cualquier otro problema de salud pública.