- Un artículo publicado en el British Medical Journal menciona que los que más critican a los médicos con tatuajes son sus propios colegas.
- Las personas que más se resisten son las de mayor edad por considerar que le restan seriedad a la profesión.
- Aunque la modificación de la piel parece algo reciente en realidad es una técnica surgida hace miles de años.
Hasta hace algunos años se pensaba que los tatuajes solo eran para delincuentes aunque hoy son tan habituales que incluso los médicos optan por marcar su piel. Gracias al trabajo de algunos expertos de la tinta se han convertido en obras de arte y esta técnica se ha vuelto protagonista de exposiciones en las galerías más importantes del mundo.
Historia de los tatuajes
Ahora bien, un error frecuente es pensar que los tatuajes surgieron hace algunas décadas porque en realidad son tan antiguos como la humanidad. A través de investigaciones se ha identificado a personas del período neolítico, ocurrido 5,300 años A.C. que tenían marcas en la espalda.
Por lo mismo, se ha comprobado que esta práctica era bastante habitual en las civilizaciones antiguas. En su caso la impregnación de tinta en la piel se hacía con técnicas bastante rudimentarias y dolorosas. Además también eran comunes los piercings como una costumbre en varones y mujeres.
Después de conocer el pasado ahora es momento de analizar el presente. En fechas recientes se han derribado algunos prejuicios aunque todavía quedan algunos en activo. En especial se piensa que los tatuajes solo son para celebridades o personas excéntricas y en otras profesiones como los médicos están mal vistos.
El tema ha sido retomado por el artículo Erasing the stigma: tattoos in the medical workforce de Bea Duric publicado en el British Medical Journal. Desde su punto de vista menciona que se han conseguido avances para eliminar prejuicios pero todavía faltan otros por derribar, en especial entre los propios profesionales de la salud.
Doctores de mayor edad, los que más se oponen a los tatuajes
La autora es una joven estudiante de Medicina y desde su experiencia hace énfasis en que cada vez hay más doctores con tatuajes. Algunos son pequeños y en zonas poco visibles pero otros se inclinan por tener grandes diseños en sus brazos para que se puedan ver con facilidad.
El problema es que los que más critican esta práctica son sus propios colegas, en especial los de edad más grande. El principal argumento que utilizan es que le restan seriedad a su trabajo y provocan que los pacientes no les tengan respeto. Además se quejan que afectan a todo el gremio.
En ese tenor, cuando los médicos utilizan una bata es complicado que sus tatuajes se vean porque la mayor parte de su cuerpo está cubierto. Pero si usan una pijama quirúrgica la misión se vuelve complicada porque sus brazos son visibles.
Por otra parte, algo que se debe contemplar es que no todos los tatuajes son iguales. En ocasiones se elige una imagen representativa como el rostro de un familiar o de alguien a quien admiran mucho. Mientras que otros prefieren una frase o letras.
De igual forma, ahora han cambiado las regulaciones en gran parte de las compañías. Antes existían muchas restricciones para contratar a personal con este tipo de marcas en la piel. Mientras que ahora el mundo es más abierto e incluso se puede denunciar discriminación y racismo si hay barreras de este tipo para acceder a una plaza.