Nos encontramos una etapa en la que el dominio de la modalidad híbrida ha tenido cambios positivos, hemos aprendido qué beneficios trae consigo la interacción tanto virtual como presencial y nos ha entrenado para aprender y trabajar en las áreas de oportunidad, haciendo hincapié en que una modalidad sin duda complementa a la otra, es por esto que combinarlas hace que sea la estrategia perfecta para realizar nuestras actividades cotidianas, tales como el trabajo, la escuela, una consulta médica, etc.
Antes de la pandemia en nuestro día a día existía la realización de eventos que permitían a laboratorios y marcas interactuar con médicos, dar a conocer nuevos medicamentos, promover la salud con pacientes y profesionales de la salud como conferencias y ponencias, casos de estudio, etc. Todo esto ocurrió sin parar hasta la llegada del COVID-19
Sin embargo, los eventos fueron una de las actividades que no pararon durante la pandemia y, en el caso de la industria farmacéutica, muchas necesidades surgieron y las dudas de los pacientes y profesionales de la salud seguían existiendo, así que se buscó una solución.
Ante dichas necesidades, se abrieron espacios virtuales como: webinars, conferencias, transmisiones en vivo y eventos que conllevaban mucha más producción, pero mediante los cuales se podía interactuar de manera sencilla y generar experiencias para los usuarios de la industria de manera virtual.
Actualmente, nos encontramos en procesos de readaptación a eventos presenciales, pero eso no quiere decir que hayan perdido impacto, sino que ahora se pueden combinar y generar respuestas positivas de los usuarios interesados en vivirlos.
¿Qué conlleva realizar un evento?
Es un hecho que, además de una buena planeación, estrategia y organización, se requiere de una inversión y según un estudio realizado por Statista, la inversión de eventos ha aumentado de manera significativa estos últimos años, pues las experiencias generadas han tenido como consecuencia la experiencia del usuario y el conocimiento e interés de los temas de los que se trata en los eventos.
Debido al crecimiento que se ha obtenido, es de suma importancia considerar las buenas prácticas que la industria exige, pues la mayoría de estos eventos van dirigidos a profesionales de salud, por lo que debemos tener cuidado con la implementación de los mismos y asegurarnos de que toda la información brindada sea siempre en pro de la salud.
Por supuesto que vale la pena invertir en un evento, pero hay que considerar todo lo que esto implica y el impacto que tendrá en los niveles que se realice, así que antes de decidir si harás un evento virtual, presencial o híbrido, asegúrate de tener los objetivos claros para llevarlo a cabo.
Fuente:
Statista 2022.