El día tiene 24 horas, aunque, a veces, necesitemos más horas en el reloj para poder finalizar nuestra jornada. Ser más productivo es lo que muchas personas buscan a lo largo del día. Para lograrlo, tendrás que aprender a hackear tu tiempo, ya que así no se te escapará el tiempo entre las manos.
El tiempo es un bien escaso, pero, ¿cómo puedes aprender a hackearlo? A continuación te vamos a mostrar algunas de las técnicas que deberías poner en práctica para lograrlo.
Lo que está claro es que para ser más productivo, hackear tu tiempo es algo esencial. Será, por tanto, primordial contar con un método de trabajo o sistema para poder procesar correctamente todas las tareas a lo largo del día. Estos son algunos de los principales sistemas con los que lo lograrás.
Herramientas de gestión de tareas para hackear tu tiempo
Debes contar con una herramienta de gestión de tareas. Una de las más conocidas es ToDoist, la cual es esencial para poder gestionar tus tareas. También puedes emplear Trello para la gestión de proyectos. Aunque es cierto que existen un sinfín de opciones en el mercado de apps, para que así elijas la que mejor se adapte a tus necesidades.
Sistema GTD
Este es un sistema que fue creado por David Allen. Se trata de un método que te va a permitir gestionar bien las tareas a lo largo del día. Siempre deberás utilizar este sistema acompañado de herramientas y optimizado y adaptado 100% a tu contexto.
Método para priorizar
Priorizar, de forma correcta, las cosas que primero tienes que hacer a lo largo del día porque son importantes es fundamental. Puedes usar los cuadrantes de Stephen Covey, un método que diferencia cuatro tipo de prioridades: Importante; No Importante; Urgente y No Urgente.
Cuando entiendas este método, será muy fácil establecer, a lo largo del día, cuáles son las prioridades y qué es lo que tiene que ser hecho antes de cualquier otra cosa.
Técnica del Pomodoro para hackear tu tiempo
Otro de los métodos infalibles para poder hackear tu tiempo es la Técnica del Pomodoro, la cual se encarga de dividir tus bloques de trabajo y de descanso. Está demostrado científicamente que el cerebro rinde mejor cuando tiene descansos.
Es decir, no puedes hacer maratones de 2 horas seguidas de trabajo sin descansar. Aquí es donde entra en juego esta técnica. Por ejemplo, puedes utilizar tramos de 45 minutos de trabajo y 5 minutos de descanso. También puedes hacer 60 minutos de trabajo y 10 de descanso o 30 minutos de trabajo y 5 de descanso.
Time blocking
Esta técnica para hackear tu tiempo consiste en bloquear períodos de tiempo de tu calendario. Todas aquellas tareas que vayas a hacer a lo largo del día sería interesante que las pusieses en bloques de tiempo en tu calendario.
Si aplicas todos estos métodos para hackear tu tiempo, seguro que entras en el grupo del 10-20% de las personas que sienten que las cosas le cunden y además tiene tiempo. Recuerda siempre que el tiempo es un recurso limitado y que, una vez utilizado, ya no se puede recuperar.