La Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) han elaborado una guía para urgir el desarrollo y la aplicación de programas más sólidos de salud y seguridad en el trabajo para los trabajadores sanitarios, ya que “la pandemia de la COVID19 sigue ejerciendo una gran presión sobre ellos”.
Tal y como ha apuntado la doctora María Neira, directora del Departamento de Medio Ambiente, Cambio Climático y Salud de la OMS, “incluso antes de la pandemia de la COVID19, el sector sanitario era uno de los más peligros para trabajar…Solo unos pocos centros sanitarios contaban con programas de gestión de la salud y la seguridad en el trabajo. Los trabajadores sanitarios sufrían infecciones, trastornos y lesiones musculoesqueléticas, violencia y acoso en el lugar de trabajo, agotamiento y alergias en el medio laboral”.
La pandemia ha empeorado esta situación, según la OMS
Según la OMS, la pandemia ha empeorado esta situación. Por ejemplo, más de 1 de cada 3 centros sanitarios carecen de puntos de higiene en los puestos de atención; y menos de 1 de cada 6 países tiene una política nacional sobre un entorno de trabajo saludable y seguro en el sector sanitario, tal y como advierten desde la OMS.
“La COVID19 ha puesto de manifiesto el coste de esta falta sistemática de salvaguardias para la salud, la seguridad y el bienestar de los trabajadores sanitarios“, ha destacado James Campbell, director del Departamento de Personal Sanitario de la OMS, destacando que los primeros 18 meses de la pandemia, unos 115 mil 500 trabajadores sanitarios murieron a causa de la COVID19.
Concretamente, la OMS y la OIT recomiendan desarrollar y aplicar programas sostenibles para la gestión de la salud y la seguridad en el trabajo de los trabajadores sanitarios a nivel nacional, subnacional y de los centros de salud. Dichos programas deben abarcar todos los riesgos laborales: ergonómicos, infecciosos, físicos, químicos y psicosociales.
La activación de programas de salud y seguridad en el trabajo provocan mejoras en el entorno laboral
La guía también describe el papel que deben desempeñar los gobiernos, los trabajadores, los empleadores y los servicios de salud laboral en la promoción y protección de la salud, la seguridad y el bienestar de los trabajadores sanitarios. Destaca que la inversión, la formación, el seguimiento y la colaboración continuos son esenciales para mantener los avances en la aplicación de los programas.
Los autores de la guía recuerdan que los países que han desarrollado y están aplicando activamente programas de salud y seguridad en el trabajo para los trabajadores sanitarios han experimentado una reducción de las lesiones y enfermedades relacionadas con el trabajo y de las ausencias por enfermedades, así como mejoras en el entorno laboral, la productividad del trabajo y la retención de los trabajadores sanitarios.