Científicos mexicanos descubrieron que una planta utilizada en la medicina tradicional ayudaría en el tratamiento de diferentes tipos de cáncer.

El cuachalalato promueve la muerte de las células tumorales

La investigación realizada por el Departamento de Toxicología del Centro de Investigaciones y Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional. Demostró que el cuachalalato (la planta medicinal) promueve la muerte de las células tumorales, al mismo tiempo que estimula el sistema inmunológico para atacar diferentes tipos de cáncer.

La planta es de uso común en la medicina tradicional mexicana como gastroprotector y auxiliar en enfermedades vasculares.

Libia Vega Loyo, quien lidera la investigación, sostuvo en un comunicado del Cinvestav que sus beneficios se deben a su contenido de ácido 6-pentadecil salicílico anacárdico. El cual promueve la muerte programada (apoptosis) de las células tumorales sin afectar a las células normales.

Actualmente, el método utilizado para matar las células enfermas es a través de la inflamación o la necrosis. Sin embargo, esto provoca un daño importante en los tejidos, así como los efectos secundarios de un tratamiento contra el cáncer, detalló Cinvestav.

Descubrió que el ácido 6-pentadecilsalicílico no mata las células normales, sino que las induce a detener la proliferación. Es decir, se expanden más lentamente pero no mueren.

Planta medicinal VS cáncer: Este compuesto es capaz de estimular el sistema inmunológico

El investigador explicó que este compuesto es capaz de estimular el sistema inmunológico. Tiene una función de fosforilación muy específica en ciertas proteínas o quinasas, cuyo papel es señalar a los macrófagos (un componente importante del sistema inmunológico) para que sean más reactivos y respondan rápidamente a los desafíos que se presenten.

Esto significa que inducen la muerte de las células tumorales y activan el sistema inmunitario para atacar con mayor eficacia.

El estudio se ha realizado en modelos con cáncer de mama e in vitro (en probeta o ambiente controlado). En líneas celulares de leucemia y células del tracto gastrointestinal, en concreto del estómago.

Además, estudios preliminares combinan ácido 6-pentadecil salicílico con otros antineoplásicos. Con esto, se observó reducción de la toxicidad de la quimioterapia, manteniendo la misma eficacia farmacológica de reducción tumoral.

Aparte de lo anterior, se han encontrado una importante sinergia con el carboplatino para reducir los tumores de mama de forma más eficiente.

La investigación se encuentra en pruebas preclínicas del uso

La investigación, publicada en Toxicology and Applied Pharmacology and Molecules, muestra que los antineoplásicos como el taxol (un fármaco utilizado para tratar el cáncer de mama). Tiene la desventaja de ser muy tóxico para el sistema inmunitario, ya que quema las células de la médula ósea y disminuye el número de glóbulos blancos.

Esto “deja al paciente inmunodeprimido, muy susceptible a infecciones, siendo la consecuencia más grave de todas las quimioterapias”, advierte la investigación.

En cambio, la planta medicinal del cuachalalato no agrede a las células inmunitarias, por lo que no se producen cambios significativos como una respuesta inflamatoria o alérgica. Esto lo convierte en un compuesto muy seguro para tratar el cáncer, señaló Vega Loyo.

Actualmente, la investigación se encuentra en pruebas preclínicas del uso de los ácidos anacárdicos de cuachalalate en conjunto con otros agentes antineoplásicos clásicos utilizados en la clínica como carboplatino, cisplatino, taxol y 5-fluorouracilo.

“Con la combinación encontramos un efecto protector del ácido anacárdico sobre los efectos tóxicos de los antineoplásicos clásicos en la producción de inmunosupresión y mielosupresión (toxicidad en las células sanguíneas y la médula ósea, respectivamente). Lo que indica una reducción de los efectos secundarios tóxicos. como la leucopenia y la mielosupresión por antineoplásicos clásicos en pacientes que reciben quimioterapia”, aseguró Libia Vega Loyo.

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