El contenido de salud se ha mantenido en tendencia desde el 2020 y ante la situación mundial entender qué ha causado en la sociedad es una pieza fundamental para la industria farmacéutica, pues es la manera en la que podremos comunicar.
Según datos de talkwalker, en las primeras etapas de la pandemia la gente se preocupaba principalmente por la disponibilidad de pruebas, el número de casos, las prácticas de cuidado y distanciamiento social.
Después, la conversación fue evolucionando entorno a la vacuna y sobre este mismo tema se siguió hablando hasta 2021, pues ya era un hecho en México y un gran porcentaje de la población debería haber adquirido su vacuna.
En medio de esta situación, lo que sucedió con la nueva normalidad también se compartía en sentimientos de la sociedad, pues la adaptación fue fundamental. Aun así, la preocupación por las actividades que se realizan de manera cotidiana ha continuado a pesar de la evolución de la pandemia.
Podríamos abarcar muchos puntos relevantes, como la interacción híbrida, el e-commerce, entre otros temas de interés, con el fin de concluir lo siguiente:
Y es que podemos afirmar que, sin duda, toda la evolución que se ha tenido para un 2022 (digital en su mayor parte) ha sido gracias a todas las preocupaciones, sentimientos y emociones del consumidor, pues estas inquietudes han exigido que se den respuestas que puedan favorecer las interacciones, así como el diagnóstico y tratamiento en el caso de personas que padecen alguna enfermedad.
Por ello, es sumamente importante que como industria exista seguimiento de las conversaciones, no sólo acerca de la industria en sí, sino de todos aquellos complementos que son fundamentales para la implementación de soluciones ante cualquier situación.
Finalmente, escuchar a la sociedad es ideal para identificar la desinformación a través de las emociones, opiniones y sentimiento que predominan en el consumidor, por lo que así obtendremos respuestas ante las situaciones que ocurren en torno a cualquier tema relacionado con la salud para ocupar y adaptar nuestros mensajes para que sean respuestas a las preocupaciones y, sobre todo, para tomar decisiones más informadas y que brinden seguridad en la salud del paciente.
Escuchar es la parte más sencilla, pero saber hacerlo, analizarlo y con eso actuar en pro de la población, es el reto al que nos enfrentamos en la actualidad.
Fuentes:
Talkwalker