En todo el mundo se han notificado casos de carditis tras la vacunación con Pfizer. La carditis es una rara inflamación del corazón causada, a menudo, por infecciones bacterianas, víricas y parasitarias. Los subtipos más comunes de esta enfermedad son la miocarditis, una inflamación del músculo cardíaco, y la pericarditis, una inflamación del revestimiento exterior del corazón.
Un estudio de casos y controles ha descubierto que, a pesar del bajo riesgo absoluto, exite un mayor riesgo relativo de carditis asociado a la vacunación con BNT162b2, la vacuna de Pfizer/BioNTech, por lo que estima que es posible que las estrategias de vacunación deban considerar continuamente el riesgo y los beneficios para las diferentes subpoblaciones, en lugar de adoptar un enfoque de “talla única”, según sugieren en “Annals of Internal Medicine”.
Se estudiaron a 160 pacientes con carditis
Un grupo de investigadores de la Universidad de Hong Kong estudiaron 160 pacientes de caso (con carditis) y 1.553 pacientes de control (sin ella) para examinar el riesgo potencial de carditis asociados a la vacunación BNT162b2 o CoronaVac. Diez pacientes de control fueron emparejados con los pacientes de caso en función de la edad, el sexo y la fecha de ingreso en el hospital.
Después de realizar los análisis, los autores encontraron 20 casos asociados a la vacuna de Pfizer y 7 asociados a la vacuna CoronaVac. Los pacientes que recibieron la de Pfizer tenían 3 veces más probabilidades de sufrir carditis que los pacientes no vacunados. Por otro lado, los pacientes que recibieron CoronaVac tenían una probabilidad similar a la de los pacientes no vacunados de experimentar carditis.
El aumento de riesgo predominaba en los varones
Los autores del estudio también observaron que el aumento de riesgo asociado a la BNT162b2 predominaba en los varones y era más probable que se observara después de la segunda dosis. La incidencia acumulada de carditis tras la vacunación fue de 0,57 por 100 mil dosis de Pfizer y de 0,31 por 100 mil dosis de CoronaVac, lo que demuestra un riesgo absoluto muy bajo de carditis tras la vacunación.
Según los autores, ninguno de los 20 casos de pacientes con carditis tras la vacunación contra la BNT162b2 fue ingresado en la UCI o falleció durante el período de observación, en comparación con 14 de los 133 pacientes no vacunados ingresados en la UCI y 12 fallecidos.