Decir que los últimos 20 meses han sido desafiantes, es quedarse corto, pero como optimistas, animados por las nuevas ideas del “qué sigue”, nos atraen los aspectos positivos del año pasado. A pesar de lo devastadora y revolucionaria que ha sido la pandemia, también ha iluminado los cambios en los consumidores, que ya están transformando el futuro.
El detonante principal de estos cambios ha sido nuestra experiencia en casa, ha redefinido la forma en que trabajamos, compramos, vamos al médico y vivimos, ha impactado la forma en que nos expresamos y en la que consumimos todo, desde el contenido, hasta los productos o servicios.
La aceleración de la adopción digital, especialmente el comercio electrónico, es una de las tendencias más fuertes, impulsadas por la pandemia. Aunque la aceleración del comercio electrónico ha sido profunda, pues en los EE. UU., es equivalente a 10 años, en 3 meses, el alcance de la transformación de las compras en línea será mucho más evidente, en el futuro cercano.
Dadas las restricciones de viaje, las tendencias de refugiarse en un lugar y las instrucciones de distanciamiento físico, nos hemos visto impulsados a una mayor conciencia del valor de nuestras comunidades locales. En Google, se ha visto reflejado en el aumento de búsquedas relacionadas con “cerca de mí”, que alcanzó un máximo histórico en los EEUU, durante el año pasado.
Hoy, los consumidores y pacientes están más conectados con sus comunidades y son conscientes de que desempeñan un papel, en este ámbito. Esto significa que las marcas se verán obligadas a relacionarse en un nivel más profundo con estos consumidores que, tanto en el sentido físico, como mental, están más presentes y buscan la conexión en todo momento.
Durante el año pasado, la idea de llevar todo el yo al trabajo, ha pasado de ser un ideal abstracto, a una realidad que ahora se siente y se experimenta de forma generalizada. Gracias a la videoconferencia, hemos visto (y escuchado) a todos, incluidos líderes y ejecutivos, en su hábitat natural: niños entrando, compañeros estornudando, perros ladrando. Con el modelo de trabajo híbrido y remoto que se espera,continúe, no podemos retroceder en el tiempo en el hecho de que conocemos a nuestros compañeros de equipo, en un nivel que es mucho más profundo, vulnerable y humano. Hoy estamos entrando en una nueva dimensión de empatía y respeto profesional más personal. Esto nos debería conducir a una apreciación más detallada de la profundidad total de lo que nuestros consumidores piensan, necesitan y sienten.
Al aceptar nuestras experiencias compartidas y la hermosa complejidad de los seres humanos, desbloquearemos nuevas ideas poderosas, relaciones creativas profundamente resonantes y, en última instancia, menos transaccionales con nuestros consumidores.
Así que, nuestra presencia digital será fundamental para conectar con nuestra audiencia y hoy, más allá de pensar en miles de millones de personas alcanzadas, debemos concentrarnos en conectar con la audiencia que se encuentra a nuestro alrededor y ser relevante para ellos.
Fuente:
https://www.thinkwithgoogle.com