Se acerca el final de año y de manera convencional comienzan las reuniones familiares y de trabajo. Se trata de una costumbre para permanecer cerca de los seres queridos y mirar en retrospectiva lo ocurrido durante los últimos 12 meses. Pero al igual que en 2020 ahora se vive un panorama distinto por la pandemia de Covid-19. Todavía no es momento de hacer fiestas o eventos multitudinarios por el riesgo que eso implica. El ejemplo más claro fue protagonizado por el personal de un nosocomio que debido a una cena previa a la navidad ahora sufre de un brote hospitalario.
Relato de lo ocurrido
El protagonista de esta historia es el Hospital Regional Universitario de Málaga en España. Todos sus trabajadores han vivido más de año y medio de actividades incesantes. Durante la crisis sanitaria se ha incrementado el número de pacientes que acuden no solo por esta infección sino por otras enfermedades.
Debido al estrés vivido los trabajadores del nosocomio acordaron adelantar su cena de fin de año. Se trata de una tradición que mantienen la mayoría de centros de salud. El año pasado no hubo por la pandemia pero en esta ocasión sí se realizó aunque con las máximas precauciones posibles. De hecho, a todos se les solicitó una prueba de antígenos para la reunión.
Las consecuencias de la fiesta
A pesar de todas que se implementaron ocurrió lo que se temía y ahora se vive un brote hospitalario. Hasta este momento suman 68 trabajadores sanitarios infectados dentro de los que acudieron a la reunión de fin de año.
Ahora bien, con base en lo reportado por los medios, todos los que se han infectado contaban con tres dosis de la vacuna de Pfizer. Debido a su profesión tuvieron prioridad para recibir la inyección adicional porque así lo determinó el gobierno de España.
Por lo anterior es que ninguno de los contagiados ha mostrado síntomas de gravedad ni se encuentra en peligro su salud. Aunque se determinó que todos deben permanecer en resguardo domiciliario al menos por un par de semanas.
Mientras que a partir de este brote hospitalario se pueden obtener varias conclusiones. En primer lugar parece que todavía no es momento de hacer reuniones o fiestas masivas. Aunque se tomen diversas medidas de seguridad es altamente probable que existan contagios.
De igual manera, la vacuna contra la Covid-19, sin importar el fabricante, ayuda a evitar cuadros graves de la enfermedad y no contagios. Por lo tanto, sin importar el número de dosis recibidas es probable que en cualquier momento existan infecciones pero en la amplia mayoría de los casos los síntomas son leves. Con esto en mente se refuerza la importancia que tiene recibir lo antes posible la inmunización.
