Dentro del campo de la salud existe una fuerte competencia y no solo es por la carga laboral. Cada año miles de médicos jóvenes se integran al ámbito profesional y el mayor deseo de cada uno es lograr trascender. Aunque para conseguirlo no es suficiente con tener aspiraciones sino que también es necesario esforzarse lo suficiente. Si lo que quieres es escalar posiciones dentro de un hospital o conseguir mejores opciones de trabajo entonces recuerda poner en práctica los siguientes consejos.
Es una realidad que todos deben empezar desde abajo aunque en ocasiones el crecimiento nunca llega o tarda mucho en aparecer. Tampoco se debe caer en el error de creer que todo debe ocurrir de forma exprés porque muy pocas veces ocurre así.
Por lo regular los procesos toman su tiempo y para que los médicos jóvenes logren trascender deben seguir los siguientes aspectos. Más allá de los conocimientos y la relación con los pacientes también es necesario no descuidar otros rubros dentro de tu vida hospitalaria.
Convéncete de que sí sabes
Toda la vida habrá retos que superar y cosas que aprender, pero nadie parte de cero. Siempre que un médico recién egresado se integra a un hospital es porque hay algo en él que vale la pena.
En ese sentido, recuerda que tú ya superaste muchos obstáculos dentro de tu breve carrera. No todos lo consiguen porque hay muchos que se quedan en el camino. La parte mental es muy importante para lograr trascender en esta profesión.
Constante hambre por aprender
Uno de los problemas de los médicos jóvenes cuando son contratados es que se quedan en la zona de confort y pierden la capacidad inventiva y curiosa. Dejan de innovar porque ya llegaron a una meta aunque en realidad sólo es un paso de muchos más.
Es por eso que desde que un doctor empieza su camino profesional debe tener deseos por aprender y superarse cada día. Además es una cualidad que se debe mantener durante el resto de su vida porque en esta profesión jamás se termina de aprender.
Responsabilízate de tus acciones desde el momento cero
En efecto, estar ocupando un lugar, por pequeño que sea, implica hacerse responsable de las acciones. En ocasiones se puede pensar que las grandes responsabilidades solo le corresponden a los jefes de hospital o médicos de alto rango pero no es así. En un centro de salud todos importan tanto para los triunfos como para las derrotas.
No tengas miedo de pedir ayuda
En el campo de la salud es fundamental el trabajo en equipo porque la suma de los esfuerzos individuales generan resultados colectivos. El problema es que muchas veces los médicos jóvenes tienen miedo de preguntar o tan solo de reconocer que no saben algo.
Quedarse callado ante cualquier inquietud es lo peor que se puede hacer. Por eso, cualquier duda, por más mínima que parezca, es fundamental que sea aclarada al instante. De la misma forma en que tú haces preguntas a los pacientes durante la consulta es natural que tengas dudas con respecto a tu nueva vida profesional.
Mantén una buena relación con todos los compañeros de trabajo
Aunque los pacientes siempre son la prioridad no significa que sea lo único en lo que te debas enfocar. Nunca debes caer en el error de ignorar o descuidar a tus colegas y demás compañeros de trabajo. Sin importar la posición todos son importantes. Desde el personal de intendencia hasta el director del hospital, procura mantener una relación cordial y de respeto con todos. No es necesario que sean amigos pero sí que sepan que existes para tú los puedas ayudar o ellos a ti cuando sea necesario.