En la práctica clínica, los profesionales del sector sanitario se encuentran con muchos desafíos para poder cuidar de la salud y el bienestar de los seres humanos. Más aún, cuando se trata de promover un embarazo saludable, que permita traer al mundo bebes sanos y fuertes. Por ello, las pruebas prenatales, son una herramienta, que no solo favorece a la madre y el feto, sino que también facilita la labor médica.
“Es necesario tener claro que las pruebas prenatales son claves para un buen diagnóstico médico”
De hecho, las instituciones de salud, lanzan campañas de sensibilización sobre temas de salud reproductiva y sexualidad, que buscan prevenir enfermedades y disminuir las cifras de muerte materno infantil. Sin embargo, el compromiso médico va más allá. Debido a que, cuando una mujer se encuentra en estado de gravidez, cualquier fisiopatología pone en peligro más de una vida.
Es ahí, donde, completar la historia clínica de la mujer, se convierte en el primer paso para identificar factores de riesgo de diversa índole; psicosociales, ambientales, obstétricos y perinatales; que dan vía a una intervención oportuna y preventiva. Asimismo, por medio de las pruebas prenatales se develan anomalías genéticas, deficiencias cardiacas y malformaciones, que ayudan a tomar decisiones asertivas desde la primera etapa de gestación.
Por tanto, llevar a cabo una evaluación física exhaustiva acompañada de exámenes de laboratorio; como hematocrito y urocultivo; y pruebas diagnósticas; como ecografía o cardiotocografía; llevan a identificar y modificar los riesgos médicos centrados en las necesidades y condiciones del paciente. Sobre todo, porque de esta manera se puede desarrollar un plan de acción para cuidar la vida y salud de la mujer y el feto que lleva en su vientre.1
“Beneficios tanto para la parte médica, como para la embarazada, bajo el amparo de la prevención”
Básicamente, porque por medio de los controles prenatales se puede monitorear; en forma constante; los cambios la fisiología de la mujer, al igual que el desarrollo y crecimiento del embrión. De la misma forma, que le brinda la oportunidad al personal multidisciplinario de salud, de promover estilos de vida saludable, que sirven no solo en esta etapa, sino en todas las etapas de la vida.2
Así mismo, se hace énfasis en la educación nutricional, generando conciencia sobre los problemas que causan en el organismo los alimentos ricos en grasa saturada, sodio y azúcar. A la vez, que se promociona la importancia de acoger una dieta llena de nutrientes; gracias a las frutas, verduras, lácteos y pescados; que favorecen el óptimo desempeño de los órganos de nuestro cuerpo.2
De ahí, que podemos decir que las pruebas prenatales facilitan la labor médica, porque ayudan a prevenir, orientar y detectar factores de riesgo, en la madre y él bebe. Lo que hace que, cualquier anomalía o problema de salud se pueda tratar a tiempo. Igualmente, debemos reconocer que la interacción con los pacientes mejora la buena praxis, ya que, se centra en la persona, en las condiciones de salud y en las necesidades puntuales de cada paciente.
Referencias:
1.P. Susana Aguilera, M.D. Peter Soothill. Control Prenatal. Rev. Los condes. [internet] 2014 [consultado 20 sep. 2021]; 25(6): 880-886. Disponible en: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0716864014706340.
- Arispe Claudia, Salgado Mary, Tang Giuliana, González Carmen, Rojas José Luis. Frecuencia de control prenatal inadecuado y de factores asociados a su ocurrencia. Rev. Med Hered [Internet]. 2011 oct [citado 2021 Sep. 20]; 22(4):159-160. Disponible en:
http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1018-130X2011000400004&lng=es.