El campo de la salud es uno de los más competidos y cada año hay miles de jóvenes que egresan de las universidades y se integran al campo laboral. Cada uno representa una competencia para ti. Es por eso que sin importar la experiencia con la que cuentes siempre te debes enfocar en encontrar cómo puedes mejorar la relación con tus pacientes. De no hacerlo hay muchos médicos que pueden tomar la delantera y eso es peligroso para ti y tu consultorio.
Ahora bien, el trabajo dentro del consultorio nunca es sencillo porque las jornadas no son iguales. A diario se deben atender todo tipo de casos y por eso es necesaria una extensa preparación. Aunque más allá de los conocimientos que se adquieren en la escuela también se necesitan más elementos. Dentro de las características que debes reforzar para mejorar la relación con tus pacientes se encuentran las siguientes.
Explota tu empatía médica
En su definición más concreta la empatía consiste en colocarse en el lugar de las demás personas. Por lo mismo debes de atender a los pacientes como te gustaría que lo hicieran contigo. Más allá de los conocimientos también debes de enfocarte en la parte emocional para lograr transmitir seguridad y tranquilidad.
Algo tan simple como llamar al paciente por su nombre es un muy buen primer paso. La mayor queja de los pacientes es que no se sienten atendidos dentro del consultorio al considerar que reciben un trato frío. Para que eso no te ocurra, personaliza tus consultas al llamar por su nombre o apellido a las personas que atiendes.
La importancia de la escucha activa
Durante la consulta debes enfocar toda tu atención en la persona que tienes enfrente. No debes distraerte ni mirar a la computadora mientras el paciente habla porque vas a perder valiosa información. Además si eso ocurre también es un gesto de mala educación.
Si logras desarrollar tu escucha activa también vas a conseguir consultas más dinámicas porque no vas a preguntar dos veces lo mismo. Como consecuencia también se reduce el tiempo del servicio y eso te permite ser más eficiente y eficaz.
Aprovecha la tecnología
Aunque la tecnología ofrece muchas ventajas en ocasiones solo es utilizada con fines de entretenimiento. En realidad puede ser aplicada en distintas áreas como la salud. Para mejorar la relación médico-paciente puedes utilizar aplicaciones móviles que te ayuden a ofrecer explicaciones más concisas. Inclusive con el apoyo de imágenes puedes hacer más dinámica la consulta.
Responde todas las dudas de los pacientes
Es normal que en todas las consultas se generen dudas acerca de la enfermedad o tratamiento recomendado. Una de tus tareas es resolverlas todas y jamás permitir que el paciente salga del consultorio con preguntas. Con esto también contribuyes para una adecuada adherencia y así conseguir una recuperación plena.
Por su parte, la mejor forma para mantener una buena relación médico-paciente es a través de la confianza. Es un elemento que debe prevalecer dentro del consultorio porque es la clave para diferenciarte de tus colegas.
Mientras que si quieres conocer más a profundidad cómo se puede mejorar la relación entre médicos y pacientes entonces hay un libro electrónico para ti. Fue realizado por el portal Menos días con heridas y lo mejor es que es gratuito. Lo puedes descargar en este enlace y te será de gran ayuda en tu práctica clínica.