Sabemos, que el ser humano; desde antes de su nacimiento hasta los últimos años de vida; necesita de una serie de elementos para crecer, aprender y llevar una vida productiva. Por ello, la alimentación artificial, se hace presente como una alternativa para que el organismo reciba los micronutrientes que necesita. Así, se consigue suplir las necesidades básicas del niño, cuando no es posible la lactancia materna.

La alimentación artificial puede ser de mucha ayuda

Podemos ver, que, aunque es indiscutible que la leche materna es la mejor fuente de vitaminas, minerales y nutrientes para el infante, existen circunstancias en los cuales se dificulta esta labor. De ahí, que la alimentación artificial en los lactantes, sea necesaria cuando se presentan patologías como la Galactosemia, infecciones como el VIH, obsesos mamarios sin tratar, varicela y tuberculosis.

Además, ante el abuso de alcohol y sustancias toxicas o el uso de fármacos contraindicados para el neonato; como el litio; se requiere frenar la alimentación materna y usar fórmulas lácteas. Es así, que frente a estas condiciones adversas, se convierte en una buena opción sustituir; en forma parcial o total; la lactación por parte de la madre, sin afectar la correcta nutrición del bebe y su desarrollo físico y mental.

Fuera de eso, se pueden encontrar algunas ventajas en alimentar al bebe con leche de formula, que pueden favorecer al infante y a su familia. Ya que, está recomendada en casos en los cuales exista algún limitante por parte de la madre. Al tiempo que, facilita la participación en el cuidado del bebe de otros miembros de la familia. De igual manera, así, se mantiene el control en el horario y la calidad de la alimentación.

Algunas precauciones

Sin embargo, encontrar la mejor leche de formula, debe convertirse en una tarea conjunta de los padres y el pediatra. Especialmente, porque se requiere cubrir las necesidades básicas de acuerdo a la edad y el momento de desarrollo en que se encuentra.

Pero, también se necesita vigilar las reacciones adversas, como las alergias y la intolerancia a alguno de los componentes. A la vez que hay que dejar clara la posibilidad de alterar el mecanismo de succión del bebe y algunas posibles afecciones orgánicas.

De ahí, que sea posible encontrar opciones muy reconocidas en el mercado, que incluyen Fórmula lista para el consumo, fórmulas líquidas concentradas y fórmulas en polvo. Adaptadas y avaladas por pediatras, para similar la leche materna en las diferentes etapas de vida del bebe.  Con el fin principal de brindar energía, proteína, fibra, vitaminas, minerales y oligoelementos para que él bebe se mantenga sano.

Por tanto, aunque la tecnología y la ciencia cada vez ofrecen más alternativas. Cabe anotar, que, a pesar de que la fórmula propuesta para la alimentación artificial en los niños viene enriquecida con muchos más micronutrientes, la leche materna no tiene reemplazo. Es así, como los profesionales de la salud insisten en concientizar a las madres sobre la importancia de lactar, obviamente, al menos que se establezca algún impedimento medico difícil de subsanar.