Durante la pandemia temprana, el nivel de compras presenciales se ha mantenido constante, por encima de sus mínimos. A medida que los clientes se adaptan al nuevo patrón de consumo, los establecimientos mantienen su ventaja, ya que los pacientes están dispuestos a trasladarse de un sitio a otro, con el fin de satisfacer sus necesidades.
Muchos de los que anteriormente elegían el transporte público para trasladarse a las tiendas, han hecho la transición a vehículos privados, para mantener la privacidad y el distanciamiento social. Es evidente, un aumento de los vehículos particulares, por lo que la publicidad en el auto puede llegar, ahora, a más consumidores, en momentos clave, cuando estén listos para detenerse y comprar en el camino.
Para los minoristas, cada nueva fase de la pandemia de COVID-19 ha presentado, también, diversos desafíos y ha planteado muchas preguntas. ¿Cómo navegarán los consumidores por esta nueva normalidad y cómo será? ¿Qué efecto ha tenido la pandemia en el comportamiento de compra y cuáles son las proyecciones de cambio sostenido?
En los años previos al COVID-19, el comportamiento de los consumidores ya había estado cambiando, a medida que alternaban las compras, tanto en línea como en las tiendas. A pesar del aumento de las opciones para los compradores, el comercio minorista en las tiendas continuó, no sólo prosperando, sino que se superó fuertemente, ante el comercio electrónico. Según la National Retail Foundation, en 2019, las compras en línea generaron solo el 10% de los ingresos minoristas y el 90% se dio en las tiendas.
Cuando el COVID-19 golpeó por primera vez y se establecieron cuarentenas y distanciamiento social, la mayoría de los minoristas asumieron que el gasto de los consumidores se movería naturalmente, en línea. Sin embargo, las compras in situ para dicha categoría se mantuvieron relativamente constantes; incluso, en las tiendas, durante el pico de la pandemia, los ingresos totales sólo cayeron un 9%.
El repunte en algunas categorías, como mejoras para el hogar, comenzó en abril, el aumento de las visitas a las tiendas, estimulado por el deseo de abastecerse de artículos de limpieza, las ventas aumentaron del 80% al 130%, en comparación con el año anterior, ya que los periodos de confinamiento han llevado a los consumidores a limpiar y mejorar su entorno de vida.
Cuando las tasas de infección se vuelvan a controlar y a medida que las vacunas lleven la inmunización a las comunidades, los negocios físicos esperan que los consumidores acudan a las tiendas en un número aún mayor.
Actualmente, el mejor lugar para utilizar una estrategia que mantenga su marca presente en los momentos que más importan a sus clientes, se da en el auto, gracias a las apps de movilidad.
Fuente:
Stay the course:Report How in-car advertising fuels retail growth. March 2021.