Aunque el sector de la salud es indispensable por las funciones que realiza durante décadas ha sido ignorado y menospreciado. Como consecuencia se pueden observar los hospitales públicos que están descuidados y con carencia de equipo. Lo mismo ocurre con los salarios de médicos y enfermeras. Mientras que un aspecto todavía más preocupante es la condición laboral en la que están miles de trabajadores y por lo tanto su mayor exigencia desde hace años es recibir una basificación.
Condiciones de trabajo precarias
Tan solo al inicio del actual sexenio se informó que había al menos 80 mil trabajadores en el sector sanitario que laboraban sin contratos fijos o por honorarios. Inclusive algunos de ellos habían mantenido esta precaria condición por décadas.
Ante lo anterior, una de las primera promesas de Andrés Manuel López Obrador al convertirse en presidente fue ofrecer una basificación para todos los médicos y demás elementos de esta área. Pese a las buenas intensiones no se pudo concretar por la llegada de la pandemia.
En su momento el propio subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, declaró que esta situación atípica había provocado que se detuviera la basificación de personal. Aunque se tenía la disposición y era una de las prioridades, se tuvo que suspender el proceso.
Con respecto a la fecha en que se retomaría la regularización de trabajadores no quiso ofrecer una en específico. Afirmó que todo dependerá de la evolución de esta emergencia sanitaria para poder retomar las contrataciones formales y hacer un cambio en quienes ya son empleados pero no cuentan con prestaciones ni beneficios.
Propuesta arriesgada que puede ser mortal
Mientras que ahora el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, ha retomado el tema. De manera directa se ha comprometido a ofrecer una basificación inmediata a los médicos de la entidad solo si cumplen con una condición.
Lo que pide es que laboren en la zona norte de la entidad porque es la que actualmente enfrenta más carencias. De hecho, durante los últimos meses ha existido una huida de doctores por el drástico aumento en los niveles de violencia e inseguridad.
Uno de los casos más graves ocurrió apenas a inicios de julio cuando fueron asesinados dos trabajadores de la salud e incendiada una ambulancia en la frontera de Jalisco con Zacatecas. El hecho provocó que algunos centros de salud fueran abandonados por los estudiantes que ahí realizaban su servicio social.
Ante esta problemática Alfaro se comprometió a ofrecer una basificación, sin importar su antigüedad, a los médicos que permanezcan en esta zona o se trasladen para apoyar a la población de la región.
A partir de lo anterior surge una disyuntiva sobre si realmente vale la pena el ofrecimiento. Aunque se trata de una buena propuesta también implica arriesgar la integridad y seguridad personal. Por eso depende de cada personal determinar si acepta o rechaza esta propuesta.