Según datos de la Encuesta de Seguimiento de los Efectos del COVID19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos (ENCOVID-19), el 27.3% de las personas adultas presentan depresión y un 32.4% presentan ansiedad. Ante la necesidad de genera consciencia y soluciones sobre salud mental durante la crisis por la COVID19, organizaciones e instituciones de salud realizan eventos digitales orientados a su divulgación.
El laboratorio farmacéutico Lundbeck, especializado en salud mental, ha celebrado el seminario “Salud mental, un desafío en tiempos de COVID19”, el cual contó con la participación de diversos especialistas en temas de salud mental.
La salud mental representa un problema complementario a falta de recursos e infraestructura
Nuria Marcos, directora médica, regulatoria y de calidad de Lundbeck México comentó que las enfermedades y trastornos relacionados con la salud mental continúan bajo un estigma social. Esto representa un problema complementario a la falta de recursos e infraestructura para hospitales, carencias de atención médica, falta de acceso a tratamientos y obstáculos al querer reintegrar pacientes en la sociedad.
Asimismo, la esquizofrenia es el problema de salud mental con más estigma en México, según ha indicado Ricardo Saracco Álvarez, subdirector de investigaciones clínicas en el Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente. El estigma que viven estas personas las lleva a ser víctimas de discriminación, violaciones de sus derechos humanos y una serie de limitantes con respecto recibir atención sanitaria general.
Entre los trastornos más devastadores de esta problemática se encuentra la depresión, la cual tiene la capacidad para provocar una discapacidad importante. Luis Daniel Alviso de la Serna, neuropsiquiatra de Ávalon, centro de atención a la salud mental en México, informó que esta condición afecta a 300 millones de personas en el mundo.
La mayoría de personas con depresión son mujeres
Además, 260 millones presentan trastornos de ansiedad y la mayoría de personas con depresión con mujeres, con una incidencia de hasta 35% mayor a la de hombres, como ha comentado Nuria Marcos. También ha advertido que en México, la depresión es un problema de salud pública que afecta a 15 de cada 100 habitantes y muchos casos, podrían no registrarse por falta de diagnóstico. Al ser un trastorno con facilidad de volverse crónico, este dificulta la vida cotidiana de sus pacientes, ante lo cual requiere medicamentos y psicoterapia profesional.
Por su parte, la Organización Panamericana de la Salud informó, la salud mental ha sido llevada al límite en el continente americano debido a la pandemia por COVID19, principalmente en Brasil, Estados Unidos y México. A este respecto, la organización agregó que el 65% de la población sufre cuadros depresivos y ansiedad.
El Reporte del Comité de Salud Mental de la Secretaría de Salud determinó 6 mil 827 personas han reportado algún trastorno relacionado con la salud mental durante el primer trimestre de 2021. Sara Montero, directora de Lundbeck México, Centroamérica y Países Andinos, concluyó, hay una brecha considerable entre las necesidades de atención para trastornos mentales y recursos disponibles.
En este sentido, advirtió que es indispensable incrementar la inversión en esta parcela, ya que en México, solo el 2.2% del gasto total de salud, se asignó en este ámbito durante 2017.