A lo largo de la era moderna la industria farmacéutica ha logrado importantes inventos que han beneficiado a la población mundial. El constante desarrollo de nuevos medicamentos ha permitido evitar millones de muertes cada año. Mientras que ahora es poder apreciar su importancia con mayor claridad gracias las vacunas conseguidas contra la Covid-19. Todo lo anterior parte de la investigación clínica que es una pieza clave en todo el proceso.
En ese sentido y debido a que cada 20 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Investigación Clínica, Roche México llevó a cabo el Panel “Investigación clínica, un aliado en salud pública”.
Durante esta sesión, a través de la voz de expertos se abordó la trascendencia de este tema, que ha permitido determinar el uso, la efectividad y seguridad de las soluciones que se crean a los distintos padecimientos con base en las necesidades de los pacientes y los sistemas de salud.
Importancia durante la pandemia
El ejemplo actual más claro que tenemos es el desarrollo de investigación clínica que ha surgido para enfrentar el reto de salud que ha representado el virus Sars-Cov-2, en el que, a nivel mundial investigadores, especialistas, autoridades, industria farmacéutica, entre otros representantes del ecosistema de salud, han desarrollado en tiempo récord vacunas, pruebas diagnósticas y posibles tratamientos para ayudar a reducir el impacto de esta pandemia.
Con el objetivo de mostrar un panorama completo acerca de la investigación clínica en el país, es que este panel contó con la representación de figuras relevantes como el Dr. José Carrillo, director de Investigación del Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga”; la Dra. Fedra Irazoque, investigadora Principal del Centro de Investigación y Tratamiento Reumatológico S.C; la Lic. Alejandra Medina, responsable de Desarrollos y Nuevos proyectos de la Clínica Bajío y Daniele Galbiatti, directora de Investigación Clínica Roche México.
Durante el evento también se contó con un mensaje especial por parte del Dr. Germán Fajardo, director de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) quien expresó:
“La investigación científica es indispensable en el desarrollo de cualquier país. En particular la investigación clínica es un tema que debemos seguir impulsando con mayor ímpetu con inversión en infraestructura y recursos humanos adecuados, particularmente médicos y enfermeras. Tenemos en el futuro muchas oportunidades que aprovechar en este campo para lograr un mejor posicionamiento de México en esta área, que impacten en problemas de salud pública tan importantes como las enfermedades no transmisibles principalmente”.
Oportunidad para México
En esta sesión se abordaron temas como los retos y beneficios de la investigación clínica en México para el desarrollo de soluciones terapéuticas, aprendizajes en el contexto de la pandemia de COVID-19, la importancia de la potencialización de iniciativas a través de alianzas público-privadas y oportunidades del uso de tecnología y digitalización en procesos relacionados con los estudios clínicos.
Daniele Galbiatti, destacó que el proceso por el que atraviesa una molécula desde su descubrimiento hasta que llegue a una paciente resulta bastante complejo, ya que se debe comprobar la seguridad y eficacia del fármaco para los pacientes. Esto es posible gracias a la realización de estudios clínicos, que son desarrollados para contestar preguntas científicas específicas, los cuales son estricta y cautelosamente revisados por los Comités de Ética en Investigación.
Por su parte, el Dr. José Carrillo y la Dra. Fedra Irazoque, coincidieron sobre la necesidad de realizar ajustes en los procesos relacionados con la investigación clínica y cómo han contribuido a fortalecer el abordaje y las alternativas que los sistemas de salud pueden ofrecer a la sociedad, de esta manera se comparten conocimientos y experiencias que pueden aprovecharse en el desarrollo de soluciones innovadoras.
Finalmente, Alejandra Medina destacó los retos que implica la transformación digital en cuanto a procesos de investigación, así como la optimización de datos que permitan la toma de decisiones más ágiles y a su vez esto se traduzca en alternativas tangibles para dar solución a retos de salud.