Desde su llegada a México hace poco más de dos décadas los medicamentos genéricos han dividido opiniones. Mientras algunos señalan que son benéficos por ser accesibles para la mayoría de la población de bajos recursos también se ha puesto en duda su eficacia. A la fecha entre los propios profesionales de la salud existen distintos puntos de vista porque algunos afirman que son iguales a los de patente y otros consideran que su eficacia es menor. Aunque lo cierto es que ahora de nuevo están inmersos en una controversia por una propuesta nacional.
Todo parte de la idea presentada por los senadores María Antonia Cárdenas Mariscal y Américo Villarreal Anaya. Ambos impulsan un proyecto para que en la emisión de recetas médicas se incluyan los medicamentos en su denominación genérica. De esta manera los pacientes tendrían mayor facilidad para elegir esta opción y así pagar costos menores.
Los legisladores pertenecientes a Movimiento Regeneración Nacional (Morena) presentaron una iniciativa para que la Secretaría de Salud (SSa) promueva y comunique a la población la eficacia y seguridad de este tipo de fármacos. Además de impulsar la actualización del personal en esta materia.
¿Genéricos funcionan igual que los de patente?
En la propuesta, que plantea reformar la Ley General de Salud, los senadores destacaron que entre los profesionales del sector existe una falsa creencia que relaciona el bajo precio con la falta de calidad de las medicinas, por lo que muchas veces no hacen la prescripción por principio activo.
Al respecto, los legisladores afirmaron que la seguridad, calidad y eficacia de estas sustancias se encuentran garantizadas por el Estado, toda vez que cuentan con los trámites, procedimientos de autorización y vigilancia sanitaria.
Ambos coincidieron en que los medicamentos genéricos que se venden en México tienen el mismo efecto terapéutico que sus equivalentes de marca o referencia. Mientras que la única diferencia es que se comercializan entre 80 y 85 por ciento más baratos en comparación con los demás.
Destacaron que cerca del 92.6 por ciento de los fármacos consumidos en el país están fuera de patente o provienen de una sola fuente y son fabricados por empresas altamente productivas, pero tienen una reducción de costos iniciales en contraste con los medicamentos más innovadores.
Disminuir el gasto en salud de las familias mexicanas
Señalaron que el gasto directo que las familias mexicanas destinan a salud representa el 41.4 por ciento de todo el gasto público y privado en salud. Además, hay 295 mil 437 hogares en situación vulnerable que tienen un gasto catastrófico en salud, lo que se traduce en que el 4.3 por ciento de estos se empobrecen aún más para gastar en salud.
La iniciativa, que busca adicionar los artículos 226 Bis 1 y 226 Bis 2 a la Ley General de Salud, se analizará en las comisiones unidas de Salud, y de Estudios Legislativos, Segunda.
Los legisladores plantearon que los médicos tengan la posibilidad de indicar la “denominación distintiva” de su preferencia. En dicho caso, tendrán que informar al paciente sobre las opciones de medicación. Cuando en la receta se exprese la “denominación distintiva” de los fármacos o su marca la venta o suministro podrá sustituirse por la versión genérica más accesible.