El trabajo del médico no es nada sencillo y tú lo sabes muy bien. Atender a pacientes a diario requiere de mucha atención y concentración para dedicar el tempo necesario a cada uno. Aunque dos muestren síntomas similares puede tratarse de patologías distintas porque las características personales marcan grandes diferencias.
Por otra parte, un aspecto que siempre debes de tener presente es la alta competencia que existe dentro de tu gremio. De manera constante son inaugurados consultorios en todo el país y eso significa que debes esforzarte todavía más para destacar. Además cada año hay miles de jóvenes que egresan de las universidades y se integran al campo profesional.
Ante esta situación es necesario poner atención en todos los detalles. No solo se trata de tus conocimientos sino en la manera en que atiendes al paciente lo que marca diferencia entre tu servicio y el de tus colegas. Dicho todo lo anterior, te compartimos algunos consejos que debes aplicar dentro de tu vida dentro del consultorio para ganar la confianza de quienes visitan tu consultorio y así formar relaciones a largo plazo.
Mantente actualizado
Una preocupación que siempre siempre debe tener un médico es acerca de su preparación. Debido a que se trata de una profesión en la que aparecen novedades constantes tú debes esforzarte para mantenerte actualizado. De esta manera vas a mostrar una preocupación por tu propia trabajo diario y eso es algo muy bien valorado por los pacientes.
No confundas la empatía con tus emociones
Siempre se menciona la importancia de la empatía al momento de atender a los pacientes. De manera simple consiste en tratar a los demás como te gustaría que lo hicieran contigo. Se trata de la base para ofrecer un servicio humanitario.
Ahora bien, una regla que debes de seguir es ofrecer el mismo servicio a todos tus pacientes y jamás guiarte por tus emociones. La empatía mal entendida puede provocarte problemas como mostrar favoritismo hacia algunas personas y al final eso puede ser contraproducente.
Escucha con la mente abierta y sin prejuicios
En todos momentos debes ser respetuoso con todos tus pacientes. Uno de los problemas que más ocurren al interior de los consultorios es que los médicos a veces no saben comunicar la información a las personas, al mismo tiempo que no saben escucharlas. Algo simple pero que tiene muy buenos resultados es siempre hablar de usted a los demás a menos que te indiquen lo contrario.
La visita al consultorio no solo significa decirle a tu paciente qué hacer sino hacerlo partícipe de su cuidado. Escucha con atención lo que dice y responde con amabilidad a sus preguntas.
Presta atención e interés en el paciente
Parece muy obvio pero jamás lo debes de olvidar. Durante la duración de la consulta el paciente debe ser lo único importante para ti. Cualquier distracción no solo es un gesto de mal gusto sino que puede provocar diagnósticos erróneos que pueden llegar a ser peligrosos.
En caso de que necesites mandar un mensaje o hacer una llamada con urgencia espera hasta que termine la consulta para continuar con tu vida personal.
Sé franco y honesto
Aunque la mayoría de las ocasiones no hay problema con la honestidad, todo se complica al momento de dar diagnósticos que no son favorables para el paciente. Tener que transmitir malas noticias no es sencillo pero se trata de una cuestión de tu trabajo que debes afrontar. Para este tipo de situaciones lo mejor es buscar el momento preciso pero jamás caer en el error de esconder la información porque eso nunca es benéfico.
