Para hablar de plenitud en una persona es necesario tomar en cuenta varios aspectos. Aunque de manera convencional se suele olvidar la salud dental. Al igual que ocurre con los demás médicos es necesario acudir a revisiones periódicas para identificar cualquier posible enfermedad desde sus primeras etapas. De esta forma se pueden evitar complicaciones que pueden llegar a ser de alta peligrosidad a futuro.
En ese sentido, un dato alarmante es que la mayoría de los habitantes de nuestro país no muestran interés en las visitas recurrentes con el odontólogo. Como resultado, más del 90 por ciento de las personas padecen caries y 60 por ciento de la población presenta algún tipo de enfermedad periodontal.
Otras enfermedades relacionadas
De acuerdo con la Dra. Lorena Badial, gerente de atención y experiencia al paciente de Grupo dentalia, estas cifras son alarmantes y se convierten en un llamado para estar atentos ante ciertos síntomas. Agregó que la salud dental también es importante porque puede generar que padecimientos como enfermedades cardiovasculares, diabetes, enfermedades respiratorias crónicas y renales se agraven.
Al respecto, la Dra. Badial comenta que, entre las enfermedades que se encuentran ligadas a la salud dental, están las enfermedades del corazón o cardiovasculares porque están conectadas por la propagación de bacterias y otros gérmenes desde la boca a otras partes del cuerpo por el torrente sanguíneo.
“Algo similar sucede con la diabetes, pues además de ser más susceptibles a contraer enfermedades avanzadas en las encías, la falta de una salud dental adecuada puede afectar el control de la glucosa y contribuir al avance de la diabetes. Adicionalmente, es importante considerar que entre más alto sea el nivel de azúcar en sangre, mayor será el riesgo de presentar caries, gingivitis, periodontitis, aftas o candidiasis y sequedad de la boca”.
Del mismo modo, una deficiente salud dental está directamente ligada con la agudización de algunas enfermedades respiratorias. En algunos casos se multiplica el riesgo de contraer ciertas afecciones respiratorias como asma, enfermedad obstructiva crónica (EPOC) y sinusitis. Las personas que padecen enfermedades respiratorias crónicas y utilizan medicamentos antiinflamatorios, pueden presentar sensación de boca seca, aumento de la placa dentobacteriana, presencia de problemas periodontales y ser más susceptibles a las infecciones producidas por hongos.
Por otro lado, se encuentran las enfermedades renales, encabezadas por la insuficiencia renal crónica (IRC). La mayoría de los pacientes presentan una higiene dental deficiente, lo cual puede complicar la enfermedad sistémica de base y están predispuestos a formar cálculo dental, debido al aumento de los niveles de urea en saliva, fósforo y por las grandes cantidades de carbonato de calcio que algunos ingieren como parte de su tratamiento.
También existen enfermedades sistémicas que pueden ser detectadas por sus manifestaciones tempranas en la boca. Por ejemplo, las enfermedades sanguíneas como leucemias, pancitopenias, trastornos en la formación de las plaquetas, eritrocitos y leucocitos, además de Covid-19.