Desde la aparición de la Covid-19 comenzó una lucha en la industria farmacéutica por conseguir una vacuna. A partir de los conocimientos previos sobre los coronavirus y la tecnología actual es que se consiguieron resultados en tiempo récord. Nunca antes en la historia se había desarrollado un proyecto de este tipo en menos de un año. Aunque dentro de los competidores uno que ha estado rodeado en varias polémicas ha sido AstraZeneca.
Lista de problemas que han surgido
Todo surgió durante su etapa de ensayos clínicos porque dos de los voluntarios desarrollaron mielitis transversa. La consecuencia inmediata fue una suspensión de las pruebas para llevar a cabo una investigación al respecto. Al final no se pudo comprobar que ambos eventos tuvieran relación directa con la inmunización y el proyecto AZD1222 continuó.
Mientras que las críticas más severas llegaron hace unos días cuando se acusó a la vacuna de AstraZeneca de causar trombosis en al menos 15 personas. Eso originó una ola de críticas que condujeron a la suspensión momentánea en 24 países de Europa, África, Asia y América Latina.
Vacuna de alta eficacia
Fueron las insistencias de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) las que consiguieron que la inoculación de nuevo fuera aceptada en algunas naciones. Mientras que ahora la propia farmacéutica ha presentado los resultados de un nuevo estudio internacional para transmitir confianza a las personas.
Lo que se observó es que tiene una eficacia del 79 por ciento para prevenir la Covid-19 sintomática. Mientras que aumenta al 100 por ciento con respecto a la fase avanzada de la enfermedad y las hospitalizaciones. Para obtener estos datos se dio seguimiento a la evolución de 32 mil 449 ciudadanos de Estados Unidos, Chile y Perú que recibieron la vacuna.
Otro aspecto significativo fue que se comprobó que la inmunización de AstraZeneca sí logra generar anticuerpos en adultos mayores. Precisamente una de las dudas que existían en naciones como Alemania es que no funcionara en este sector de la población.
En tanto que uno de los puntos más importantes del estudio es que señala que no hay indicios de que la inyección provoque trombosis o efectos adversos graves de otro tipo. Con esto se busca poner fin a la discusión surgida hace unos días.
Por lo pronto, lo mostrado en esta investigación se parece mucho a las cifras de los ensayos fase 3 presentados a finales del año pasado. En ese entonces se informó que tenía una eficacia del 62 por ciento. Con esto, se pretende que la confianza en torno a la vacuna regrese para continuar con su aplicación alrededor del mundo.