Durante los últimos meses la industria farmacéutica ha cobrado una fuerte relevancia por el contexto actual. A partir de investigaciones previas se consiguió la vacuna contra la Covid-19 en tiempo récord. Antes de que transcurriera un año del primer caso oficial ya se había diseñado una y en este caso fue la de Pfizer y BioNTech. De hecho fue la primera aprobada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para su uso de emergencia y hasta el momento es la que muestra una mayor eficacia con el 95 por ciento.
La vacuna más popular en el mundo
Por el hecho de ser la primera en estar disponible también es la que goza de mayor popularidad. Un estudio reciente realizado por la organización Our World in Data mostró que es la que han recibido más personas alrededor del mundo. Aunque a pesar de los buenos resultados también existen algunos aspectos negativos que representan una barrera para muchas naciones.
Con respecto a los puntos en contra se encuentra su almacenamiento. Al menos durante un inicio se afirmó que requería de ultracongeladores o de lo contrario la sustancia activa dejaba de funcionar. Así se manejó durante meses hasta que la propia farmacéutica declaró que no era necesario. Ahora se sabe que mantenerla en un refrigerador convencional es suficiente.
De igual forma, se llegó a mencionar que la aplicación de la primera dosis apenas ofrecía una protección del 50 por ciento. Mientras que era necesario obtener las dos inyecciones para alcanzar el máximo nivel prometido. En tanto que ahora se sabe que la aplicación de la primera inmunización sería suficiente para los supervivientes de la Covid-19.
Mientras que otro aspecto que se ha modificado con el pasar del tiempo es el referente a las molestias y efectos secundarios que provoca esta inoculación. Al principio y por lo ocurrido en los ensayos clínicos se dijo que quienes recibían el biológico de Pfizer desarrollaban una sensación similar a la de una resaca pero después de unos días desaparecía.
Con lo anterior en mente se afirmó que las molestias más frecuentes que provocaba eran cefalea, fiebre y dolores en el cuerpo. No ocurre en todas las personas pero sí son los efectos inmediatos más comunes.
Las nuevas molestias que se agregan
En cambio ahora el Comité de Farmacovigilancia de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) ha modificado su guía de recomendaciones de esta vacuna. El mayor cambio es que diarrea y vómitos han sido añadidos como efectos secundarios y se suman a la lista antes mencionada.
La actualización parte de lo que ha ocurrido en los países de la Unión Europea en donde ya se aplica la inmunización. Aunque las agencias sanitarias de otros países e inclusive la propia Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) no han hecho comentarios al respecto.
Por lo pronto, vale la pena recordar que en México la vacuna de Pfizer originalmente sería exclusiva para el personal médico. Aunque durante las últimas semanas eso ha cambiado y ahora también se administra a los adultos mayores de algunas comunidades del país.