En el Día Mundial contra la Obesidad no podemos dejar de recordar que esta condición ha sido un gran factor de riesgo ante la pandemia de Covid-19, porque si algo nos han repetido hasta el cansancio las autoridades sanitarias es justo que el llamado síndrome metabólico aumenta considerablemente el riesgo de muerte y complicaciones con la nueva enfermedad que asola al mundo.
Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud y encargado de la gestión de la pandemia de Covid-19 en México, ha reiterado desde hace un año, cuando empezaron las famosas conferencias vespertinas, que nuestro país viene arrastrando una epidemia de obesidad y sobrepeso, lo cual se ha debido a una promoción inexplicable de alimentos ricos en azúcares, sodio y grasas saturadas, además de que los gobiernos anteriores poco o nada hicieron al respecto.
Lo anterior, aunado a una vida más sedentaria, sobre todo en las ciudades, ha ocasionado que la mayor parte de la población en nuestro país viva con sobrepeso u obesidad, ante lo cual, por supuesto, los médicos de primer contacto deberían contar con una actualización constante para dar una mejor orientación al respecto.
De hecho, México tiene una de las tasas más altas de sobrepeso y obesidad de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con el 73% de la población en riesgo. Por si fuera poco, 34% de las personas que viven en esta condición de exceso de peso sufren obesidad mórbida.
Así es, en México la obesidad es un grave problema de salud pública, sobre todo por ser un factor de riesgo para más de 20 condiciones crónicas como las siguientes: diabetes, hipertensión, enfermedades cardíacas, dislipidemia, apnea del sueño, cáncer y, por supuesto, Covid-19, pues el exceso de peso corporal afecta al sistema inmune, además de que daña el sistema respiratorio, como se ha visto durante este año de pandemia.
De hecho, a decir de la Sociedad Mexicana de Obesidad (SMO), “las personas con obesidad tienen el doble de probabilidades de ser hospitalizadas si la prueba es positiva para Covid-19”. Asimismo, “las enfermedades relacionadas con el sobrepeso reducirán la esperanza de vida en México en más de cuatro años durante las siguientes tres décadas”.
No todo termina ahí, el escenario es catastrófico cuando se examina con cuidado lo que pasa con los niños de México, área donde se percibe un franco crecimiento de la obesidad infantil, la cual se ha duplicado desde finales de los años 90 a la fecha. Se calcula que uno de cada cinco niños sufre de sobrepeso u obesidad.
Dado lo anterior, y en vista del desastre en salud que viene por dichos datos, ahora más que nunca es necesario establecer campañas para hacer conciencia en niños y adultos de la importancia de alimentarse bien, evitando azúcares, carbohidratos simples y alimentos chatarra, además de fomentar el consumo de agua simple, frutas, verduras y ejercicio diario.
También es importante que los pacientes estén en contacto permanente con su médico de confianza para vigilar su estado físico general, pero en especial el peso, y en su caso, dar seguimiento para bajar los kilos de más de manera saludable, con o sin tratamiento farmacológico. En suma, como recomienda la SMO, es necesario tratar a la obesidad con toda la seriedad del caso.
Estetoscopio
Luego de los médicos y enfermeras de primera línea en la batalla contra la Covid-19 del sector salud, lo lógico es que en la vacunación anti covid hubiera seguido el personal de salud de hospitales privados y los médicos de primer contacto, tanto de los consultorios anexos a la farmacia como aquellos que trabajan de forma privada, quienes también han tenido que arriesgar la vida con tal de seguir atendiendo a sus pacientes de toda la vida.