La muerte súbita, donde el corazón deja de latir sin razón aparente, es una de las causas más frecuentes de mortalidad en el mundo, aquejando a toda la población en general. Ya que, los bebes de cuna menores de un año, también padecen de este flagelo, sin que los padres apenas puedan percatarse del hecho. Así mismo, las estadísticas revelan que los deportistas tampoco se escapan, señalando que hay por lo menos 2 o 3 casos de atletas entre 100 mil personas en el mundo que mueren a causa de este síndrome. (fundación San Rafael, s.f.)
Las enfermedades coronarias que afectan el músculo cardiaco y la actividad eléctrica, se asocian al síndrome de muerte súbita. Donde los hombres con edad entre 50 y 65 años son los que tienen mayor peligro de desarrollar esta patología silenciosa, que surge en el momento menos esperado. Sin embargo, las palpitaciones sin sentido aparente, al igual que el dolor en el pecho y los mareos esporádicos, deben ser motivo de consulta médica para minimizar el riesgo.
En México, los fallecimientos por muerte súbita en adultos van en aumento, indicando que más de 53 mil casos pueden darse en el año. Donde los individuos mayores de 35 años tienen su protagonismo, con enfermedades de arteria coronaria, miocardiopatías, displasias arritmogenicas, taquicardia ventricular, obesidad y consumo de drogas ilícitas, que por un sobreesfuerzo muscular llegan a desarrollar una fibrilación ventricular donde el corazón se detiene. (elsevier, s.f.)
La prevención, es el primer paso para evitar enfermedades del corazón. Por tanto, los hábitos saludables, deben seguirse al pie de la letra. Haciendo de la alimentación consiente, el ejercicio físico, la higiene de sueño, las actividades lúdicas, las buenas relaciones personales y las técnicas meditativas, un estilo de vida, para que el cuerpo y la mente se mantengan en equilibrio.
La detección precoz, por medio de controles médicos rutinarios, es otra forma de disminuir el riesgo de enfrentarse a el síndrome de muerte súbita. Ya que, a través de un electrocardiograma, es posible que los profesionales de la salud visualicen enfermedades congénitas del corazón, como la miocardiopatía hipertrófica, las anomalías en la arteria coronaria y patologías en el ritmo cardiaco. De tal suerte que sean tratados en etapas tempranas y no disminuyan la calidad de vida del individuo
Disminuir los factores de riesgo, en los lactantes, es una recomendación de gran valor. Debido a que esta patología no describe factores tangibles. Sin embargo, algunos datos indican que el cuidado prenatal inadecuado, un parto prematuro, madres adolescentes, antecedentes familiares y la exposición al humo de cigarrillo, aumentan el riesgo de que los bebes mueran antes del año de nacido, sin causa aparente. (kindshealth, s.f.)
El riego de morir a causa del síndrome de muerte súbita, nos obliga a adquirir hábitos de vida sanos, realizar controles médicos rutinarios y escuchar los signos de alarma que muestra nuestro cuerpo. Ya que, esta afección aparece, haciendo que en un instante se pierda el pulso, luego la conciencia y la capacidad de respirar, provocando la muerte, a menos que se consiga realizar una desfibrilación y una reanimación cardiopulmonar en pocos segundos.