De cara al inicio del invierno se ha presentado una preocupante alza de nuevos casos Covid-19 en gran parte del mundo. Ahora Estados Unidos y Europa son las regiones más afectadas con récords de nuevos casos que se rompen a diario. Pero inclusive naciones que parecía que habían superado el problema han mostrado que no es así. En Corea del Sur se acaba de presentar el mayo número de contagios en nueve meses, lo que ha obligado a instaurar nuevas medidas de protección.
Mientras tanto, se han generado fuertes expectativas acerca de las primeras vacunas contra esta cepa de coronavirus que ya están listas. La primera en concluir todo el proceso fue la de Pfizer/BioNTech e inclusive ya fue aprobada para iniciar su aplicación masiva en el Reino Unido. Con esto, será el primer país en recibir el insumo.
Pero además también se hizo oficial la compra de la mencionada vacuna por parte del gobierno de México. Se tiene previsto que las primeras 250 mil dosis lleguen antes de que concluya este 2020 para ser aplicadas lo más pronto posible. De igual forma, se hizo oficial que el personal médico será el primero en recibir la inmunización por el riesgo al que se encuentran expuestos debido a su trabajo.
La otra prometedora vacuna que ya está terminada
Por su parte, la otra vacuna que también ha concluido todas las etapas de desarrollo es la mRNA-1273 de Moderna. Lo que se obtuvo después de ser aplicada a más de 30 mil voluntarios es que ofrece una eficacia del 94.1 por ciento con respecto a la generación de anticuerpos y así mantener protegidas a las personas. También ya inició el proceso de registro en Estados Unidos para poder ser comercializada y ahora permanece a la espera de un veredicto final.
Aunque ya se comprobó que funciona para la generación de anticuerpos, la única duda pendiente es la relacionada con la duración de la protección. Pero ahora, gracias a los resultados de un estudio publicado en el New England Journal of Medicine se ha obtenido una posible respuesta.
Como parte de un análisis a 34 voluntarios que participaron desde la fase 1 del ensayo clínico se identificó que la vacuna ofrece una protección mínima de tres meses. Todos han sido monitoreados desde entonces y se ha detectado que mantienen un alto nivel de anticuerpos.
El trabajo menciona que la duración total es mucho mayor pero todavía no se ha podido comprobar con exactitud por ser una vacuna recién creada.
Por lo pronto, se tiene previsto dar seguimiento de al menos un año a los voluntarios para identificar si mantienen la protección contra la enfermedad y el nivel de anticuerpos.
Mientras tanto, de todos los proyectos en fases avanzadas es la única vacuna que no tiene convenios con México. De tal forma, luce bastante complicado que pueda ser aplicada en nuestro país.