Dentro de la actual batalla por desarrollar vacunas contra la Covid-19 parece que Rusia ha obtenido una victoria, aunque no de la mejor forma. En días pasados el mandatario Vladimir Putin le confirmó al mundo que ya contaba con la primera e inclusive ya alista la aplicación masiva. Aunque el proceso que se siguió y la falta de una regulación ha generado más dudas que seguridad.
En ese sentido, el factor clave para que Rusia consiguiera la vacuna en muy poco tiempo es porque no se respetaron las indicaciones que la propia Organización Mundial de la Salud (OMS). El gobierno evitó la fase 3 de ensayos clínicos y así obtuvo la inmunización Sputnik V. El mismo nombre es una referencia al primer satélite artificial puesto en órbita en 1957 y con el que la Unión Soviética se colocó por encima de Estados Unidos.
Vacuna divide opiniones
El hecho de evitar hacer pruebas y verificar la eficacia de la vacuna y posibles efectos secundarios es lo que más hace dudar a la comunidad médica. Para conocer su opinión, la aplicación móvil Doctor’s Handbook realizó un sondeo a tres mil 040 médicos con respecto a esta vacuna.
Como resultado, el 52 por ciento dijo que no se aplicaría la vacuna. Mientras que apenas el 24.5 por ciento indicó que estaría de acuerdo en recibirla. El resto mostró dudas y dijo que no tenía una respuesta definitiva.
Dentro de quienes mostraron una actitud negativa ante el proyecto ruso el motivo es la inseguridad que les genera una vacuna que no ha seguido todo el estricto protocolo para verificar su efectividad. El hecho de que tal vez no genere inmunidad en las personas puede derivar en una sensación de falsa seguridad. A su vez, también existe el riesgo de que provoque afectaciones u otro tipo de daños que pueden ser de diversas magnitudes.
Los que sí apoyan el proyecto ruso
Por otra parte, también se debe escuchar la opinión de quienes apoyan y están dispuestos a recibir una inoculación. En su caso, mencionaron que las dudas de la comunidad internacional es por ser una iniciativa de Rusia. Aseguraron que si fuera de cualquier otro país no se habría presentado una negativa tan elevada.
A su vez, cuando se preguntó a los médicos si le recomendarían esta vacuna a sus pacientes, el 20 por ciento dijo que sí. El resto dijo que no o que lo haría pero con reservas. Además también se hizo énfasis en que existen otros proyectos de vacuna que sí han seguido todas las medidas necesarias ya ya se encuentran en etapas avanzadas.
Como se puede apreciar, existe un fuerte escepticismo dentro de la propia comunidad médica. Mientras que algunos aprueban la vacuna e inclusive están dispuestos a recibirla, la mayoría tiene dudas o simplemente no la recibiría.
Y tú como médico, ¿estarías dispuesto a recibir o le recomendarías esta vacuna a tus pacientes?