Los profesionales de la salud realizan un trabajo indispensable dentro de cualquier sociedad. Pero también se debe considerar que su labor es bastante pesada y suele desembocar en altos niveles de estrés.
Para evitar sufrir del llamado Síndrome de Burnout y que eso impacte en tu salud o en la atención a los pacientes es necesario que implementes las siguientes acciones. Recuerda que si te encuentras en un estado óptimo vas a poder realizar tu trabajo de mejor manera.
- Toma breves descansos
El trabajo del médico es muy pesado porque implica estar en constante contacto con los pacientes. Por lo tanto puede ser bastante desgastante y se genera una rutina que deriva en estrés. Para evitar el aburrimiento y cansancio mental es recomendable tomar breves descansos de no más de cinco minutos a lo largo de tu jornada laboral. - Evita hacer rutinario tu trabajo
Cuando algo se repite una y otra vez se vuelve tedioso y eso es muy peligroso. Para evitarlo intenta dividir tus labores en distintos facetas. Además recuerda que jamás vas a recibir a dos pacientes exactamente iguales. - No veas tu trabajo como una carga
No importa lo pesado que pueda ser tu trabajo, nunca lo veas como una carga porque se creará una barrera mental. Recuerda lo que te motivó a estudiar Medicina y toma en cuenta las recompensas adicionales que obtienes por cuidar la salud de tus pacientes. - Mantén un estilo de vida saludable
La mejor forma de motivar a tus pacientes para que adopten un estilo de vida saludable es pregonar con el ejemplo. Mantén una dieta equilibrada, realiza actividades físicas con frecuencia y descansa lo más posible. Recuerda que lo mismo que menciones durante las consultas lo debes de realizar en tu vida cotidiana.