Cuando eres un profesional de la salud debes de estar preparado para enfrentarte a todo tipo de situaciones. En este trabajo nunca existen dos pacientes iguales y cada día es distinto porque nunca sabes lo que te tocará vivir. Mientras que algunos días puedes pueden ser de rutina, en otros te puede tocar vivir situaciones extremas como lo reportado en Brasil.
En este caso, la extraña situación se vivió en el hospital municipal Lourenço Jorge, ubicado en Rio de Janeiro. Al lugar llegó una ambulancia con un hombre que presentaba heridas de bala. Por la gravedad de las heridas, el paciente fue enviado al área de Urgencias en donde se le proporcionó toda la atención necesaria.
La historia tomó un nuevo rumbo cuando los médicos a cargo descubrieron una granada en uno de los bolsillos del pantalón del hombre. La situación tomó por sorpresa a todos porque es algo para lo que ningún profesional de la salud está preparado.
Momentos angustia
Ante lo anterior, se optó por desalojar la zona del hospital en la que se encontraban y pedir apoyo al escuadrón antibombas de la policía local. Poco tiempo después llegó el personal calificado para recoger el explosivo con sumo cuidado y llevárselo para desactivarlo.
Durante los minutos de incertidumbre que se vivieron no se vio perjudicada la atención dentro del nosocomio. A pesar del miedo general que se vivió, tanto los médicos como los demás empleados mostraron su mayor profesionalismo.