A lo largo de su carrera política, Andrés Manuel López Obrador ha mostrado una lucha constante contra la corrupción. En reiteradas ocasiones ha mencionado que se trata de la mayor barrera que impide el crecimiento del país. Aunque resulta difícil hacer un cálculo, algunos señalan que la corrupción cuesta el equivalente al 80 por ciento de la recaudación de impuestos federal.
Por todo lo anterior, en cuanto Andrés Manuel llegó a la presidencia, anunció que no permitiría la corrupción en su gobierno. De igual forma, en ocasiones anteriores ha comentado que existen actos ilegales dentro del sector salud que no permitiría que se repitieran. En torno a este tema, durante su reciente conferencia matutina explicó que existen tres proveedores de medicamentos a los que “les declaró la guerra”.
De forma específica, se trata de Grupo Fármacos Especializados S.A. de C.V., Distribuidora Internacional de Medicamentos y Equipo Médico S.A. de C.V. y MAYPRO. A decir del mandatario, entre las tres acaparan las ventas directas al IMSS e ISSSTE. La situación ha levantado sospechas en torno a posible favoritismo y tráfico de influencias.
Por lo pronto, AMLO ya envió un oficio a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). En el documento se solicita impedir la participación en licitaciones o adjudicaciones directas a las tres empresas proveedoras de medicinas y materiales de curación.
Para las nuevas licitaciones di a conocer un oficio a las áreas competentes, encargadas de este asunto. Lo que pido es impedir la participación de tres empresas que el año pasado vendieron más de 60 por ciento de toda las medicinas y materiales de curación al gobierno. Lo que debe prevalecer es una competencia justa y no una en la que existan las influencias y los favoritismos.