Uno de los retos más importantes del sector salud a corto y mediano plazo son los antibióticos. Específicamente, la creciente resistencia bacteriana a estos fármacos. El problema no solo es cada vez más común a escala internacional. Incluso se han descubierto mecanismos alternos que utilizan los microorganismos para hacerse todavía más fuertes frente a estos medicamentos.
El zinc podría ser una esperanza en la lucha contra las superbacterias. Un estudio liderado por la Universidad de Queensland apunta que el metal podría utilizarse para desarrollar nuevas terapias. El documento, publicado en PNAS apunta que el sistema inmune utiliza este elemento para luchar contra ciertas bacterias. En particular aquellas que causan Infecciones del Tracto Urinario (ITU).
Estrategias alternativas al uso de antibióticos
A escala internacional, se registran alrededor de 150 millones de nuevos casos anuales de ITU. Roman Kapetanovic, coautor del estudio, apunta que su equipo estudió la respuesta inmune a la Escherichia coli uropatogénica (UPEC). Esta bacteria es una causa común estas infecciones. Asimismo, variantes del patógeno suelen adquirir características de resistencia a antibióticos.
Previo a sus experimentos, los investigadores ya sabían que el zinc era tóxico a la bacteria. Pero se comprobó visualmente que los macrófagos lo utilizan como parte de la respuesta inmune. De acuerdo con Kapetanovic, también se detectó que la UPEC tiene un mecanismo de defensa. Esta estrategia las hace resistentes a la toxicidad del metal liberado por las células atacantes.
Comparadas con bacterias no-patogénicas, la UPEC puede evadir la respuesta tóxica de zinc liberada por los macrófagos. Pero también hallamos que, incluso si este mecanismo falla, el patógeno es naturalmente resistente al metal. Estos descubrimientos nos dan claridad acerca de cómo funciona el sistema inmune. Además, abren la puerta a posibles tratamientos que no dependen de antibióticos. Por ejemplo, bloquear las habilidades de escape del microorganismo.
Minh Duy Phan, también coautor del estudio, comentó que se logró identificar los genes relacionados a la resistencia de la UPEC al zinc. A futuro, aseguró el experto, se podrían buscar estas características en otros microorganismos. Así, se podrían combatir a las bacterias sin utilizar antibióticos. Y de esta forma, tener nuevas formas de eliminar eficazmente a las superbacterias.