De los grandes retos del sector salud, pocos son tan desafiantes como el cáncer. Esta neoplasia es más fácil de tratar que hace algunas décadas, pero no es una enfermedad sencilla. Además de compleja, pone también un significativo estrés financiero al sector salud. En parte, porque sus terapias son costosas. Pero también por el gran aumento en la incidencia entre la población joven.
Para México, este crecimiento sería más pronunciado que en el resto de América Latina (Latam). De acuerdo con Notimex, tanto la incidencia como la mortalidad anual del cáncer en el país tendrían un nivel de casi el doble para 2040 con respecto a sus estadísticas actuales. Estas cifras son incluso más altas de las que se tienen estimadas para el promedio mundial.
México, un foco rojo de cáncer
De acuerdo con Globocan, hoy en día se registran alrededor de 1.4 millones de nuevos casos de cáncer cada año a escala internacional. En cuestión de muertes, el número asciende a 673 mil. En los próximos 20 años, se espera que la incidencia incremente en 78 por ciento (2.5 millones). Por su parte, los decesos casi se duplicarían, para aproximadamente 1.2 millones de fallecimientos.
En México, las cifras de incidencia y mortalidad son 190 mil 667 y 83 mil 556, respectivamente. Pero Globocan estima que estos niveles aumenten a 359 mil 420 y 172 mil 961 en 21 años. Es decir, un incremento de 88.5 por ciento en la tasa de nuevos casos. Y en fallecimientos, sería un aumento de 107 por ciento. Ambos números están muy por encima del promedio global y regional.
La Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) afirma que en México se han llevado a cabo importantes esfuerzos para detener el avance de la enfermedad. Particularmente, en la parte de prevención. Se destacó en especial la implementación de un seguro sanitario popular. También alabó la formación de profesionales y la creación de registros especializados.
Fernando Freyría, en entrevista con la agencia mexicana, reafirmó la importancia de bases de datos sólidas. El director general de la Fundación Fomento de Desarrollo Teresa de Jesús comentó que es el primer paso para un Programa Nacional de Control Integral de Cáncer. Uno donde colaboren tanto el sector público como el sector privado.