Como lo sabes, ser un profesional de la salud en nuestro país no es nada sencillo. Se trata de una de las carreras con mayor demanda por parte de los aspirantes. Lograr ingresar a cualquiera de las instituciones educativas es uno de los máximos retos que se pueden enfrentar. Pero una vez en la Facultad de Medicina, existen otros obstáculos por vencer.
En ese sentido, en años recientes se ha mencionado mucho el abuso físico o psicológico (también conocido como bullying) del que son objeto los estudiantes. Se trata de un problema general que se presentan en la mayoría de las escuelas y en todos los niveles educativos.
Al respecto, el Dr. Pedro Emiliano Farfán Flores afirmó dentro del XXI Congreso Internacional de Avances en Medicina (CIAM) la gravedad del problema. Expuso que en años recientes se ha observado que en las Facultades de Medicina de México se ha incrementado este tipo de violencia.
La agresión puede ser física o emocional. Su impacto es directo en el autoestima de las personas y pueden llegar a provocar la deserción escolar. Son responsables quienes observan, aprueban y no intervienen. Inclusive se ha detectado casos de médicos residentes que abandonan la especialidad por bullying.
Por su parte, tan sólo el año pasado la Universidad de Guadalajara (UdeG) publicó el libro “Determinaciones sociales en el sistema de salud mexicano. Repercusiones y afectaciones en la salud de médicos residentes”. En la obra se detalla que el problema se ha extendido al campo profesional.
En los hospitales públicos suele haber una jerarquía absoluta, indiscutible e incuestionable entre los médicos residentes que estudian alguna especialidad de acuerdo con los años previos de estudio. Esto origina abusos de autoridad y que muchos sean víctimas de bullying.
