La medicina es, en ocasiones, una mezcla entre arte y ciencia. Como todavía no se comprenden muchos elementos del cuerpo, a veces los especialistas deben confiar en sus instintos. A veces, ni siquiera los doctores más preparados pueden dar respuesta inmediata a un conjunto de síntomas. Así le sucedió a un paciente de 60 años que sufría sudoración cíclica excesiva.
Annals of Internal Medicine publicó el caso en sus páginas. El paciente tenía episodios de sudoración profusa cada 24 a 32 días. Los eventos sucedían hasta 8 veces con 13 horas de separación y duraban varios minutos. El hombre no presentaba ningún otro síntoma. Cuando sus doctores le mandaron a hacer estudios, no se encontró gran cosa.
Durante 3 años, los síntomas permanecieron sin explicación. Se descartó efectos farmacéuticos secundarios, pues solo consumía pantoprazol para el reflujo. No había viajado fuera del país ni presentaba fiebre o pérdida de peso, así que no era infección viral. Análisis de orina, metabólico, de sangre, hormonal y de tiroides también indicaban funcionamiento normal.
Respuesta verbal, la primer clave de la sudoración
Uno de estos episodios de sudoración ocurrió durante una visita médica. El paciente aseguró que sentía cómo se aproximaba. Después, bajó su cabeza para agarrarla con sus manos. En el transcurso del fenómeno, la velocidad de sus respuestas verbales disminuyó significativamente. Al terminar el evento, los especialistas reportan que un charco de líquido quedó en el suelo.
Al final, el episodio de sudoración durante la cita médica fue crucial para resolver el misterio. Los especialistas apuntaron que un ataque cerebral podría ser el responsable. En efecto, el análisis de una electroencefalografía reveló que se trataba de un fallo en el lóbulo temporal. Al paciente ya se le ha recetado la medicación adecuada y solo ha sufrido un episodio en los últimos 18 meses.
Christopher Ransom, coautor del estudio, señala que estos ataques son difíciles de diagnosticar. Apunta que, si el doctor no presencia un episodio, solo tiene disponibles las declaraciones del paciente y su familia. Señala que el público en general tiende a enfocarse en un fenómeno, en lugar del cuadro completo. Por ello, pidió a otros especialistas vigilar episodios de sudoración cíclica similares. Espera que este caso pueda ayudar a resolver otros misterios clínicos a futuro.