Contrario a lo que pueden pensar muchos pacientes, el trabajo de un médico no termina en el momento en el que concluye la consulta. Se trata de una complicada y pesada profesión en la que es necesario documentar a cada una de las personas que atiendes, lo que toma mucho tiempo.
Pero de la misma forma en que la tecnología ha creado dispositivos más certeros y modernos, también ayuda de otras formas a los galenos. Con la llegada de los Expedientes Clínicos Electrónicos se puede obtener importantes ahorros de tiempo y dinero.
Su finalidad es la de ayudar a los médicos a documentar la información de sus pacientes y poder llevar un seguimiento de su salud. La mayor diferencia es que todo se realiza por medio de medios digitales. Gracias a esto, los consultorios se pueden despedir de considerables cantidades de papel.
A partir de las escalas de cada consultorio, los ahorros en papelería varían. Mientras más grandes sean los lugares de trabajo, el dinero que se evita utilizar es mayor. Tan sólo imagina que ya no tengas que volver a comprar papel para los expedientes de tus pacientes.
De igual forma, debes de considerar lo que evitarás en espacio físico para almacenar la documentación de todos tus pacientes. Ahora todo se puede resguardar en pequeños discos portátiles que puedes almacenar en cualquier lugar.
Es por todo lo anterior que cada vez más hospitales optan por los Expedientes Clínicos Electrónicos. Ya no se trata del futuro de la salud sino del presente.
