Hace unos días, expertos americanos apuntaron que los tamizajes de cáncer parecían mejorar la expectativa de vida de los pacientes. Este efecto se mantenía incluso en individuos que jamás desarrollaron un tumor. Entonces, se teorizó que el fenómeno se debía a un mayor compromiso de las personas con la salud. Un estudio independiente ha llegado a conclusiones muy similares. Sin embargo, su punto de análisis fue la consulta médica.
Los hallazgos se publicaron en BMC Medicine. David Ellis, coautor del estudio, señaló que el equipo analizó el caso de más de 500 mil pacientes. Todos los participantes eran originarios de Escocia. Durante 3 años, entre 2013 y 2016, se monitoreó su estado de salud física. Igualmente, se revisó la frecuencia con la que programaban, asistían y cancelaban una consulta médica.
Ellis calificó este análisis como el más grande de su tipo. El resultado general fue concluyente. No acudir a consulta con el médico parece incrementar el riesgo de muerte de los pacientes. El efecto estuvo presente entre todos los participantes, incluso aquellos relativamente sanos. Sin embargo, fue más pronunciado en personas con alguna condición mental o física preexistente.
Consulta, ¿un elixir de vida?
Para los pacientes con una condición física, el riesgo de muerte fue tres veces mayor comparado con los individuos que sí asistían a su consulta. Las personas con un trastorno mental enfrentan un peligro todavía mayor. En estos casos, la tasa de mortalidad se multiplicó por 8. También se encontraron algunas tendencias particulares en cómo la gente iba o dejaba de ir a sus citas.
Quienes más faltaban a consulta eran los pacientes con más enfermedades de largo plazo. Además, el riesgo de muerte no parecía estar ligado a su condición. De hecho, los expertos observaron un incremento en la tasa de mortalidad por todas las causas. No ir a una sola cita médica no parecía aumentar el peligro. Los problemas empezaban a presentarse tras saltarse 2 o más en el año.
Ellis y sus compañeros esperan que sus hallazgos ayuden a concientizar a los médicos. Pidieron a los profesionales de la salud utilizar estos resultados para identificar pacientes de riesgo. En el futuro, pretenden continuar con esta línea de investigación. Específicamente, desean explorar métodos que puedan mejorar la tasa de asistencia a la consulta médica de forma consistente.