A raíz de distintos factores como el actual estilo de vida basado en el sedentarismo y el incremento en las tasas de obesidad y diabetes, las enfermedades cardíacas se han incrementado en México. Esto ha provocado que se posicionen como la primera causa de mortalidad y tan sólo en el 2015 provocaron el fallecimiento de 17.7 millones de personas a nivel mundial.
Mientras que anteriormente eran exclusivas de personas de la tercera edad, cada vez se presentan en adultos jóvenes. Mientras que existen distintas pruebas para identificar el riesgo cardíaco en los pacientes, ahora se dio a conocer una nueva manera.
En este caso, la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) presentó un estudio en el que afirma que la rapidez con la que se camina puede indicar el riesgo cardíaco en las personas e inclusive las probabilidades para desarrollar cáncer.
El estudio fue realizado con los datos médicos de 12 mil 615 participantes con arteria coronal. Todos fueron sometidos a una ecocardiografía mientras realizaban ejercicio en una caminadora que gradualmente incrementaba su velocidad hasta agotarlos.
El resultado mostró que si podían caminar muy rápido sin detenerse, tenían una buena capacidad funcional; en cambio, los que mostraban complicaciones para realizar la actividad también presentaban un mayor riesgo cardíaco.
De esta forma, se piensa que mediante una prueba tan sencilla se podrían prevenir consecuencias mortales en quienes muestren riesgos más elevados.