Si bien, para poder desempeñarte como un profesional de la salud es necesario contar con la vocación de servicio, debes de estar consciente que se trata de una actividad por la que debes recibir un pago económico. Es claro que las muestras de agradecimiento de los pacientes ayudan en tu parte emocional, pero cualquier trabajo merece una retribución a cambio.
Por su parte, hasta el 2015 al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) tenía contabilizados 343 mil 700 médicos en todo nuestro país, cifra que resulta insuficiente para atender a la población. Pero a pesar de lo anterior, se trata de una profesión bastante competida.
Como sucede en cualquier nación, siempre se requerirá de un médico para cuidar a los ciudadanos, pero el problema es que en nuestro país se trata de una profesión muy mal pagada. Mientras que se requieren de muchos años para la formación del galeno, al salir al mundo laboral las ofertas no son del todo atractivas.
¿Opción alternativa de trabajo?
En años recientes se ha observado un apogeo de los consultorios anexos a farmacias, los cuales están diseñados para los pacientes de bajos recursos que no están afiliados al sector público de salud, pero no son realmente una buen opción para laborar. En la mayoría de las ocasiones los sueldos no son competitivos y no se le ofrecen prestaciones a los médicos.
Pero debido a que se requiere de una elevada inversión para abrir un consultorio propio y dentro del sector público y privado las plazas son limitadas, el integrarse a este tipo de negocios se suele hacer por necesidad y no realmente por gusto.
Ante este panorama, a pesar de la alta preparación con la que cuentan los médicos de nuestro país, su trabajo no siempre es retribuido de una forma justa. Es por eso que adquiere importancia la promesa del Dr. Jorge Alcocer de aumentar el sueldo de todos los galenos de México, aunque todavía no existe una fecha para que eso suceda.