Desde hace más de un siglo, la aspirina se ha posicionado como uno de los fármacos más populares y consumidos a nivel mundial por sus beneficios para aliviar el dolor de cabeza. Ahora, con el transcurrir de los años, se le han encontrado nuevas propiedades al medicamento con respecto a problemas de salud mortales.
Al respecto, un estudio realizado por científicos de la Universidad de Leeds (UL) y publicado en la revista especializada The Lancet mostró que el consumo de la aspirina también ayudaría a reducir la aparición de pólipos intestinales precancerosos, los cuales son los principales responsables del cáncer de intestino.
Como parte de la investigación, los especialistas analizaron a 700 personas con alto grado de desarrollar cáncer de intestino provenientes de 53 hospitales distintos del Reino Unido. Posteriormente se dividió a los participantes en grupos. Al primero de ellos se les suministró 300 miligramos de aspirina cada día durante un año, en comparación con el resto que recibieron distintos tipos de placebos.
El resultado final mostró que los pacientes que tomaron aspirina tenían 22 por ciento menos posibilidades de desarrollar pólipos intestinales precancerosos en comparación con el resto de los participantes.
Aunque todavía no se conoce con certeza el origen de esta relación, los científicos sospechan que dentro de las propiedades de la aspirina se encuentra el crear una capa protectora en el estómago de las personas, lo que ayudaría para evitar que al final sufrieran de cáncer de intestino.
Por su parte, el trabajo se suma a investigaciones previas que han mostrado que la aspirina también es benéfica contra el cáncer de ovario, cáncer de colon y las caries.