Aunque contrates al talento con la mayor cantidad experiencia, conocimiento y habilidades técnicas posibles, deberá de pasar por un proceso de entrenamiento. Estas sesiones le permitirán acostumbrarse a la forma de trabajar de tu negocio, familiarizarse con los flujos de trabajo y maximizar su impacto en la atención de pacientes.
Sin embargo, saber si tu proceso de entrenamiento es el más adecuado no siempre es una tarea fácil. Esta labor requiere de mucha introspección, sinceridad y una revisión objetiva y constante. Aunque pueda sonar una tarea monumental, puedes empezar con once sencillas preguntas. En esta ocasión, te presentaremos las primeras cinco:
¿Qué objetivos perseguías con el entrenamiento?
La mejor forma de evaluar un proceso es dictaminar si está entregando los resultados esperados. Identifica cuáles son las cosas que deberías haber alcanzado con tu sistema de capacitación para que puedas llevar a cabo los siguientes pasos de la revisión.
¿Tus objetivos eran SMART?
Un entrenamiento debe tener metas Específicas, Medibles, Alcanzables, Realistas y delimitadas en un Tiempo. Si tu actual proceso no tiene este tipo de límites impuestos, es recomendable diseñar otro que sí pueda someterse a estos criterios.
¿Qué tipo de información tienes para confirmar que alcanzaste tus objetivos?
Recolecta todos los datos que te permitan identificar si el entrenamiento cumplió su propósito o no. En este punto, es también importante evaluar si estas reflexiones que tienes son de la calidad suficiente como para darte un panorama correcto de la funcionalidad del proceso.
¿Había pasos claros y una funcionalidad concreta para el proceso?
No tiene caso diseñar un programa de entrenamiento para tu consultorio si no va a ser puesto en práctica por los colaboradores en su jornada diaria. Es importante que obtengas retroalimentación de tu personal para saber si todo el esfuerzo de capacitación está dando frutos o solo es una inversión innecesaria.
¿Cómo se realizó y completó la capacitación?
El formato y la periodicidad del entrenamiento puede influir significativamente en la efectividad de un curso. Reflexiona si el tipo de habilidades que pretendías enseñar no podrían ser absorbidas de mejor manera con un estilo de aprendizaje o temporalidad de estudio diferente.