Para poder llegar al lugar en el que te encuentras has tenido que aprender de todo. Desde cosas elementales hasta aspectos cada vez más específicos de la medicina. Sin embargo, cada cierto tipo es necesario reflexionar sobre algo que creías saber y renovar tus conocimientos para sacarles nuevos provechos. Recuerda que las personas nunca terminamos de aprender, pero en ocasiones el secreto radica en reaprender, particularmente en la labor del médico.
Como profesional de la salud existen muchas cuestiones que incluso cuando ya se conocen de manera previa, son susceptibles de ser apreciadas desde una nueva perspectiva para obtener nuevos beneficios que puedas aplicar en tu campo laborar y mejorar como profesional.
Aprender de los jóvenes
- Es cierto que la experiencia se obtiene a través de los años, pero eso no significa que los médicos jóvenes que apenas se inician en el campo laboral no cuenten con habilidades que te puedan servir a ti. Si tienes colaboradores novatos en tu clínica, platica con ellos para que observes su forma de trabajo y compárala con lo que tú hacías cuando eras un novato.
Desarrollar la empatía médica
- Aunque algunos médicos suelen tener mayor facilidad para desarrollar su capacidad de empatía que otros, nunca es tarde para ponerla en práctica porque se trata de una importante característica que es bien apreciada por los pacientes. Recuerda que sólo a través de la práctica podrás perfeccionarla.
Adaptarte a la transformación digital
- A diario aparecen innovaciones y dispositivos enfocados en la salud, pero aunque no es tu obligación dominarlos todos, lo que sí puedes hacer es mostrar interés en ellos para no quedarte atrapado en tiempos pasados y ver la forma en que pueden facilitar tu trabajo profesional.