Es una realidad que la obesidad se ha convertido en una auténtica epidemia que ataca a la población mexicana, pero más preocupante aún resulta su injerencia como factor de riesgo para el desarrollo de otras enfermedades y síndromes. Por tal motivo, diversos especialistas coinciden en que la solución radica en atacar el problema de raíz.
En este sentido, durante la pasada Reunión de Expertos en Obesidad, realizada en nuestro país, se dio a conocer que, derivado del incremento exponencial en el índice de personas con exceso de masa corporal, en la actualidad 7 de cada 10 adultos mexicanos se encuentran en riesgo de desarrollar enfermedades crónicas no transmisibles, dentro de las cuales las más mortales son la diabetes, los padecimientos cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.
De forma más específica, son alrededor de 86 millones de mexicanos los que están expuestos a desarrollar cualquiera de los problemas mencionados, los cuales pueden llegar a restar de entre 6 y 20 años de vida a cada persona.
Es debido a lo anterior que los expertos coincidieron en la importancia del tratamiento médico adecuado, pues sólo los profesionales de la salud cuentan con los conocimientos necesarios para recomendar un plan de alimentación y ejercicio que le permita al paciente el lograr combatir la obesidad.
Por otra parte, el problema de la obesidad no sólo afecta en la salud de las personas, sino también a la economía del país, pues de acuerdo con la Secretaría de Salud (SSa), cada año se destinan 240 mil millones de pesos en este rubro, por lo que mientras exista un mayor índice, se requerirá un presupuesto mayor.