Cuando un paciente entra a consulta, desea encontrarse con un doctor agradable. Pero muchos médicos no siempre tienen la mejor disposición para ser amables con las personas. Otros incluso ni siquiera pueden detectar cuando le caen pesado a sus clientes. No importa si quieres mejorar tu trato o porque quieres corregir malas actitudes, estos consejos pueden serte de ayuda:
1Haz cumplidos agradables tantas veces como puedas
Todos los pacientes tienen algo positivo que reconocer. Procura buscar estas características en la gente que atiendes. Cuando las notes, procura mencionarlas de la forma más sincera posible. Otros podrán notar si solo dices las cosas por decir o si de verdad lo crees.
2Pregunta cosas a los demás en lugar de hablar de ti mismo
Cualquier paciente puede apreciar el interés de su doctor. Por supuesto, esta relación va más allá de lo profesional. Es decir, intenta hacer conversación con las personas sobre su entorno personal o familiar. Recuerda: siempre es agradable cuando alguien más se interesa en tu vida.
3Recuerda que puedes aprender algo de todas las personas
Tus pacientes son mucho más que personas que vienen a cuidar su salud. Son individuos con historias y experiencias fascinantes. La forma en cómo te proyectas será más agradable si estás consciente de estas diferencias. En especial, si buscas crecer como persona a raíz de ellas.
4Trasciende los temas triviales
Una vez que te familiarices con un pacientes, ve más allá de la conversación ritual. Las personas hablan de tonterías como el clima y cómo va todo con cualquiera. Pero pocos suelen tener la agradable sorpresa de compartir sus aspiraciones e ideas profundas con otro individuo.
5Pide consejos
Muchos pacientes pueden cohibirse porque te observan como un gran profesional de la salud. Pero si nivelas esta relación, puede dar lugar a una interacción más agradable. Pedir opiniones es una excelente forma de lograrlo. No solo das por entendido que valoras su capacidad, también les das la oportunidad de compartir algo propio.
6Trata de no proyectar tus problemas en otros
La profesión médica es estresante y frustrante en muchas ocasiones. Eso no significa que debas desquitarte con tus pacientes. Una persona agradable sabe controlar sus emociones para no afectar a otros. Si te resulta imposible, entonces tómate unos minutos para calmarte, todos te lo agradecerán.